España logra el empate sobre la bocina en un mal partido ante Inglaterra (2-2)

Andrea Merle 15/11/2016 22:57

Ambientazo en Wembley para el partidazo entre Inglaterra y España. Dos grandes selecciones se daban cita en un amistoso para despedir el 2016. El partido empezó con gran intensidad por parte de Inglaterra. Tanta que Vardy le hizo una entrada brutal a Azpilicueta. El árbitro solo pitó falta aunque la acción merecía más castigo.

Sin tiempo casi para reaccionar después de esa falta, un despiste en la defensa de España provocó que Reina derribase a Vardy en el área y cometiese penalti. El árbitro lo vio claro y Lallana lo convirtió para adelantar a los suyos en el marcador antes del minuto 9 de partido.

Los ingleses no se relajaron con el gol y presionaron la salida del balón de España que no terminaba de engancharse al ritmo del partido. Intentó imponer su juego de toque pero la presión de Inglaterra se traducía en continuos robos y ocasiones de peligro con un juego muy vertical. España no estaba cómoda mientras Inglaterra robaba balones y corría hacia la puerta de Reina. Una velocidad que creó muchos problemas a la Roja: una ocasión de peligro tras otra mientras España no reaccionaba.

Lopetegui no paró de corregir a los jugadores para que hiciesen circular el balón con mayor velocidad pero España no encontraba la solución para parar a los ingleses. Inglaterra siguió con la presión y aunque España tenía la posesión del balón no originaba ocasiones de peligro. Con estas malas sensaciones se acabó una primera parte dominada por los robos de balón y las fuertes entradas de Inglaterra.

Los segundos 45 minutos empezaron el debut de Iago Aspas con la Roja y la primera ocasión de peligro para Inglaterra a los 30 segundos de juego. Sin casi tiempo para sentarnos, Vardy metió el segundo de cabeza. Se adelantó a Íñigo Martínez y remató de forma imparable para Reina. El delantero lo celebró a lo 'Mannequin Challenge' junto a Walcott.

El guión del partido siguió siendo el mismo aunque la Roja empezó a crear alguna ocasión de peligro gracias al juego de Aspas, jugador que no fue el único en debutar ya que Ander Herrera también lo hizo sustituyendo a Thiago. Más pérdidas de balón a una Roja irreconocible en ese aspecto y más ocasiones de gol para Inglaterra que buscaba el tercero.

La dinámica del partido siguió siendo la misma aunque en Inglaterra se empezó a notar el cansancio y las ocasiones de peligro ya no eran tan abundantes. El mejor de la Roja estaba siendo Iago Aspas que desatascó un poco el juego y tuvo su recompensa en el último minuto de partido con un auténtico golazo por toda la escuadra.

En los cinco minutos de añadido la Roja espabiló y puso en apuros a la defensa inglesa. Tanto que los de Lopetegui acabaron marcando el empate en el último minuto de partido. Isco metió el segundo y España salvó un partido muy flojo.