Ambientazo en Mendizorroza para lo que fue un partido histórico para ambos clubes. El Barça ya esperaba en la final al ganador del encuentro tras vencer en la otra semifinal al Atlético de Madrid.
Empezó a rodar el balón y el Alavés buscó con insistencia el campo contrario. El conjunto local dominó los primeros minutos del encuentro con dos ocasiones de gol. Toquero no pudo rematar un buen centro de Ibai desde la izquierda y Deyverson lo intentó con un disparo lejano que se fue desviado.
Poco a poco el Celta comenzó a tener el balón en su poder y a punto estuvo de hacer el primero. Iago Aspas superó a su defensa con un gran taconazo pero Pacheco estuvo muy atento y desvió su disparo a córner cuando ya casi se cantaba gol. Los de Berizzo se empezarona sentir cómodos en el partido y crearon varias ocasiones de peligro. Sin embargo, el Alavés pudo abrir el marcador con una falta sacada por Ibai que se fue rozando el larguero.
Los dos equipos se fueron en busca del gol. Otra vez Ibai la mandó por encima de la portería y seguidamente Iago Aspas hizo lo mismo en el área contraria. El gallego buscó la vaselina pero el balón se fue alto. Ambos conjunto se fueron desinflando hacia el final de los primeros 45 minutos y el partido perdió juego y ritmo. Una primera mitad qué fue de menos a más con una ocasión clara para cada equipo.
Comenzó la segunda parte con un Alavés que buscó las posesiones largas aunque sin generar demasiado peligro. Varias faltas y pérdidas de balón por parte de ambos equipos que impedían la continuidad del juego. Los de casa volvieron a crear hasta tres ocasiones de mucho peligro pero la más clara fue para el Celta con un pase al segundo palo de Aspas a Wass que tocó el defensa y que fue anulada por fuera de juego.
La tuvo el Alavés en una llegada muy clara por banda derecha que finalizó Ibai con un tiro desde la frontal del área pero qué se fue centrado y despejó Sergio. El Celta tenía muchos problemas en defensa y también para crear juego y Deyverson tuvo otra ocasión clara de gol pero su tiro se marchó por encima de la portería.
El Celta estaba con grandes dificultades y Berizzo movió ficha: salió Bongonda y entró Pione Sisto. Daniel Wass tuvo una buena ocasión con un cabezazo que se fue a las manos de Pacheco. Jugada de larga posesión que consiguió enlazar el Celta.
Edgar Méndez que entró por Toquero fue el autor del gol del Alavés. El jugador local superó a Cabral y a Hugo Mallo y no falló para qué Mendizorroza siguiera soñando. El Alavés se veía en la final y el Celta empezó hacer un juego mucho más directo con Guidetti arriba. El partido se enredó en lo minutos finales y Mateu Lahoz añadió seis minutos. Mucho nervios en los banquillos y también en el campo hasta que por fin el árbitro pitó el final .
El Alavés jugará su primera final de Copa y Mendizorroza lo celebró por todo lo alto con fuegos artificales incluidos.