El piloto alemán Sebastian Vettel (Red Bull) ha señalado que "si llueve en Sao Paulo el 'aquaplaning' puede ser extremo", condición meteorológica que se ha repetido en las últimas ediciones del Gran Premio de Brasil.
"Una cosa importante, es que si llueve en Sao Paulo, el 'aquaplaning' puede ser extremo. Brasil es muy excitante, porque Interlagos es conocido por sus apasionados aficionados, su conducción contraria a las agujas del reloj, y la extrema altitud de la pista", comentó el bicampeón mundial en declaraciones a su escudería.
Y es que el circuito de Interlagos se aloja en la ciudad de Sao Paulo, situada a "unos 1000 metros sobre el nivel del mar", lo que el alemán reconoce que les "cuesta".
"Las curvas a izquierdas siempre generan mayor tensión en nuestros músculos, ya que el sentido de la pista es contrario al normal. Eso es por lo que normalmente hay que entrenar de un modo especial antes de Sao Paulo, para acostumbrar a mis músculos", valoró Vettel.
El alemán reconoce que "uno de los mejores lugares para adelantar, es la primera 'chicane', la llamada 'Senna'", pues en su opinión, es "perfecta" porque puede aprovechar la "estela del coche de delante para poder pasar".