SAO PAULO, 28 (EP/Reuters)
El veterano piloto brasileño Rubens Barrichello confía en seguir en la Fórmula 1 el próximo año, en la que sería su vigésima temporada en el 'gran circo', según se desprende de sus declaraciones tras la carrera en Interlagos.
"Nos vemos la próxima temporada", dijo con una sonrisa el brasileño. Su equipo, Williams, no le ofreció certezas de cara al 2012, pero el hombre con más carreras en la categoría desde que el campeonato comenzó en 1950 no dio su despedida.
En lugar de ello, el piloto de 39 años mostró a la televisión brasileña un dibujo colorido en su casco, hecho por su hijo de seis años Fernando.
"Me preguntaron: ¿Te vas a quedar el año que viene?. Dije: Miren, tengo mi casco del año próximo ya pintado. Si firmo el contrato, este va a ser mi casco para la primera carrera", declaró Barrichello.
"Todavía no estoy listo para terminar. Tengo esperanzas. Siento que estoy en el pico de mi rendimiento, me llevo muy bien con el equipo (...) lo único que falta ahora es un coche más competitivo y estoy seguro de que lo tendremos", agregó.
Barrichello insistió en su deseo de seguir compitiendo. "No necesito un gran contrato. Sólo necesito que me digan que voy a manejar un auto competitivo el año que viene. No voy a pedir ningún favor y no quiero pilotar sólo por el hecho de hacerlo", afirmó.
"Ya casi lo estoy haciendo por nada", añadió sonriendo cuando le preguntaron si correría gratis. Barrichello, que debutó en la Fórmula 1 con Jordan en 1993, sigue siendo una de las personalidades más populares en el sector de equipos.
El hecho de que la Fórmula 1 no le haya brindado una despedida apropiada, en caso de que la carrera del domingo haya sido la última en sus 19 temporadas en el deporte, generó malestar en algunos, aunque no en el paulista.
Mientras su compatriota Felipe Massa, de Ferrari, dio algunos giros con su auto para el público brasileño, exigiendo a su motor y haciendo dar vueltas a su Ferrari con un círculo de humo alrededor, Barrichello se mantuvo.
"Estoy tratando de correr el año que viene. Si fuese mi última carrera, habría dado giros por todas partes. Sabía que en mi vuelta para aminorar (tras la línea de meta) podría haberles dicho adiós (a los aficionados), pero sólo saludé. Sé que voy a volver", continuó.
Barrichello ya estuvo cerca de la retirada en el 2008 cuando Honda abandonó la F1, su carrera parecía terminada hasta que Ross Brawn, su ex director técnico en Ferrari, lo contrató para Brawn GP.
La situación en Williams es diferente. Hay rivales, como el alemán Adrian Sutil, que podrían aportar patrocinadors. El domingo, Barrichello se concentró sólo en la carrera y en no permitir que su ex compañero en Ferrari Michael Schumacher lo pasara. En su tiempo en Maranello el brasileño solía estar siempre detrás del siete veces campeón del mundo.
"Uno tiene que ser rudo en la carrera y duro para que el equipo trabaje. ¿Pero socialmente cuál es el problema?", se planteó Barrichello.
"Somos seres humanos y tenemos que tener pasión para ayudar a los demás y tener buen corazón. Así es como soy yo. Que la gente me apoye significa que he sido un buen tipo en la F1 y eso es lindo", agregó.