Pocas veces ha existido un contraste de opiniones mayor entre los aficionados de Madrid y Barcelona. En la capital, los hinchas blancos tachan la sanción de cinco partidos a Cristiano Ronaldo de "injusta" y "completamente desmedida". Por su parte en la Ciudad Condal creen que su empujón al árbitro evidencian la severidad del correctivo. Algunos aficionados culés creen incluso que le deberían haber caído más partidos.