Ya estamos bien adentrados en el otoño y nos encaminamos al invierno. "Winter is coming", que dirían los personajes de ‘Juego de Tronos’.
Eres libre de condenar a tu preciada herramienta, la bicicleta, en tu trastero y que ésta no vea el sol hasta la primavera. Se llama hibernación, ¿a ti te gustaría que te hicieran lo mismo?
Sólo ha de quedarte clara una cosa: se puede salir a montar en bici en invierno sin ser un descerebrado.
Sólo hay que seguir unos cuantos consejos a rajatabla.
Utiliza la técnica de las capas
Es importante, por supuesto, abrigarse, pero siempre con un sentido, no sin orden ni concierto. Por eso la teoría de las capas siempre es un éxito.
La combinación frío + sudor es muy traicionera y hay que tener mucho cuidado si no quieres coger una pulmonía. Por eso es recomendable vestirse por capas para ir quitándonos o poniéndonos prendas en función del calor o el frío que haga.
De esta manera, lo más normal es que subiendo un puerto te den ganas de quitarte algunas capas pero luego, al llegar a la cima y tener que hacer un descenso, probablemente te las tengas que volver a poner. Es cierto que te entrará complejo de cebolla, pero es lo más efectivo.
Una recomendación para las capas de la parte superior es una camiseta de manga larga transpirable, un forro polar fino, un cortavientos, puede que un forro polar gordo y, si la previsión da lluvia, un chubasquero.
En cuanto a las extremidades inferiores, puedes utilizar unas mallas cortas, unas largas de lycra o leggings y, si hace mucho frío, unas más gordas con forro polar.
Y no te olvides de los complementos
Ya lo has leído. Es malo pasar frío, pero mucho peor es sudar cuando hace frío. Ésta es la razón por la que hay que abrigar con esmero las extremidades y dejar que el cuerpo, pecho y espalda transpiren. Es fundamental proteger las manos, los brazos, los pies, las piernas, la garganta, las orejas y los ojos. Es decir, no te debes olvidar de los siguientes complementos:
Eres un experto en crear excusas para no hacer deporte en esta época. Que si hace frío, que si va a llover, que si se hace de noche pronto. Si fuera por las excusas, los grandes hombres nunca habrían sido grandes. ¿Quién dijo miedo? Las bicicletas también son para el invierno.