El base español Ricky Rubio mostró su satisfacción por su llegada a Minneapolis, para empezar a entrenarse con su nuevo equipo, Minnesota Timberwolves, en su primera experiencia en la NBA, marcada por un 'lock-out' que le tenía "preocupado" y que ahora le hará vivir experiencias únicas como jugar tres partidos seguidos.

"Estuve mirando el calendario y poniéndole en mi 'iPad' y me decía '16, 17, 18'. ¿Tres partidos seguidos' Vamos a Sacramento, Chicago y luego aquí en casa, va a ser duro, pero he venido a jugar a baloncesto, a divertirme porque hay muchos partidos y va a ser sorprendente jugar todos estos partidos", señaló Rubio ante los medios de comunicación en el Target Center, lamentando que entre tanto partido no vaya a poder jugar en uno de sus escenarios favoritos como el Madison Square Garden.

Además, se refirió al bloqueo que ha habido del inicio de la campaña. "Quizás estaba algo preocupado porque veía que no se llegaba a un acuerdo y las posturas estaban muy alejadas, por lo que estaba pensando en volver a España, pero antes de que llegasen las noticias, ya se decía que iba a haber un acuerdo", resaltó.

Mientras tanto, el del Masnou estuvo en Los Angeles trabajando en su juego con jugadores NBA como Chauncey Billups, Derek Fisher, Nick Young o un ex Timberwolves como Kevin Garnett, que le dio "consejos, pero más que sobre el juego, sobre la forma de vivir".

"Me dijo que la gente de Minneapolis es muy amable y que me iba a sentir muy cómodo. Los aficionados son maravillosos porque incluso en los años que no han sido buenos para los Wolves, han continuado apoyando al equipo, lo que significa que aman el baloncesto. Te quieren si haces las cosas bien y trabajas duro, mantienen su apoyo", confesó el internacional.

El ex del Joventut y del FC Barcelona Regal debutará el 17 de diciembre en un partido de exhibición y su primer choque oficial será el 26 de diciembre en el Target Center ante Oklahoma City.

Además, en las dos primeras semanas, se medirá a bases de la categoría de Russell Westbrook (Oklahoma), Brandon Jennings (Milwaukee), Jason Kidd (Dallas), Tony Parker (San Antonio), John Wall (Washington) y Derrick Rose (Chicago). "Todos los equipos tiene un gran base. Va a ser duro, pero me va a encantar", afirmó.

Ahora, Rubio debe ir adaptándose a su nueva ciudad, sobre todo a la meteorología. "Para ir al Target Center decidí ir a pie porque quería sentir el tiempo, hacía frío, un poco", señaló, comentando que nadie le abría el pabellón en un principio. "Estaba golpeando la puerta y nadie me abría, y me decía '¡Vamos, tío!'", bromeó.

El base español reconoció que prefiere "la comida española", pero dejó claro que "realmente" le gusta "la forma en la que la gente" vive en los Estados Unidos. "Son muy amables y quieren ayudarte todo el tiempo", advirtió.

Por otro lado, su compañero Antonhy Tolliver se deshizo en elogios hacia el catalán. "Es un jugador eléctrico y definitivamente un gran pasador. Te pasa la pelota cuando realmente hace falta y en el momento correcto. Solamente he jugado con otro par de bases así", señaló.