El canario Juan Carlos Arteaga cumplirá este jueves una importante efeméride, ya que arbitrará su partido 700 cuando dirija el duelo entre el Baloncesto Fuenlabrada-Lucentum Alicante de la jornada 13 de la Liga Endesa.
"La verdad es que va pasando el tiempo y con datos como estos te das cuenta de que son ya muchos años, exactamente veinticuatro temporadas", destaca el árbitro, que considera "clave para seguir creciendo en la profesión" cree que cada partido es "importante".
De todas formas, se congratula por haber podido alcanzar esta cifra siendo "básicamente soy un apasionado de este deporte": "Fui jugador, entrenador y ahora árbitro. Creo que a la gente joven le tiene que gustar el baloncesto, esto es lo más importante. Ser árbitro es una manera de vivir de cerca este maravilloso deporte".
Aunque no considera que haya nada negativo en su profesión, sí reconoce que es "duro" separarse de la familia tan a menudo. "Cuando empecé no tenía familia y ahora casado y con un hijo es duro estar siempre viajando, aunque lógicamente ellos entienden que es mi trabajo".
Por otra parte, considera que el momento actual del arbitraje ACB, "refleja exactamente el momento del baloncesto" nacional. "Tenemos un nivel muy alto, lo mismo que sucede con el nivel deportivo de nuestros jugadores y equipos. Cuando viajas te das cuenta de que internacionalmente el arbitraje español está muy bien considerado".
"Es clave la estructura y la organización de nuestra liga, es algo vital para el desarrollo de nuestro arbitraje", añade el histórico árbitro español.