El juicio por la muerte de Maradona continúa: “La casa era una pocilga”, denuncian sus hijas

Diego Armando Maradona

El proceso judicial que busca esclarecer si los profesionales de la salud que atendieron a Diego Armando Maradona en sus últimos días son responsables de homicidio continúa arrojando nuevos detalles sobre las condiciones en las que vivió la leyenda argentina antes de su fallecimiento.

El abogado Fernando Burlando, representante de Dalma y Gianinna Maradona, lanzó una dura declaración al salir del Tribunal en lo Criminal n.°3 de San Isidro, en la provincia de Buenos Aires: “La casa era una pocilga, una mugre pocas veces vista”, dijo en referencia a la vivienda donde el exfutbolista permaneció del 11 al 25 de noviembre de 2020, a pesar de su delicado estado de salud.

Un entorno “inapropiado” para una internación domiciliaria

En la segunda audiencia del juicio, celebrada este jueves, Burlando presentó una maqueta para ilustrar la precariedad del lugar donde Maradona pasó sus últimos días. Según detalló, el baño tenía “menos de un metro” y su acceso era extremadamente complicado para alguien con movilidad reducida como el astro del fútbol. Además, insistió en que, debido a la disposición de la casa, los enfermeros no podían escuchar “cualquier queja, dolencia o deseo” del paciente desde sus habitaciones.

El proceso continuará el próximo martes con las declaraciones de los oficiales Lucas Gabriel Farías y los comisarios Rodrigo Borge y Javier Leonardo Mendoza, los primeros en ingresar a la vivienda el día del fallecimiento de Maradona. “Yo lo que pretendo es que describan la mugre que era eso”, enfatizó Burlando.

Tensión en la defensa: apartan a dos abogados

El juicio también estuvo marcado por la controversia en la defensa de uno de los imputados. El Tribunal decidió apartar a los abogados Rodolfo Baqué y Martín Miguel de Vargas de la representación del enfermero Ricardo Almirón. La medida se basó en declaraciones previas de Baqué, quien había afirmado: “A Maradona lo mataron y no fue (Gisela Dahiana) Madrid”, lo que fue interpretado como un señalamiento contra su propio defendido.

“Me quieren callar porque dije que a Maradona lo mataron”, protestó Baqué, asegurando que nunca habló en contra de Almirón ni de otros imputados. Pese a su apelación, el Tribunal rechazó su reclamo y lo obligó a retirarse del recinto.

Siete profesionales de la salud en el banquillo

El juicio, que se celebrará dos veces por semana hasta julio y cuenta con al menos cien testigos, busca determinar la responsabilidad de siete acusados en la muerte de Maradona.

Enfrentan cargos el neurocirujano Leopoldo Luque, la psiquiatra Agustina Cosachov, el psicoanalista Carlos Díaz, la doctora y coordinadora de Swiss Medical Nancy Forlini, el médico Pedro Di Spagna, el coordinador de enfermeros Mariano Perroni y el enfermero Ricardo Almirón.

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