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Pedro Rocha ha sido proclamado este viernes nuevo presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), cargo para el que era el único candidato, y tras haber recibido el apoyo de la mayoría de los asambleístas de esta institución que dirige el fútbol español, según confirmó este viernes el ente federativo. La noticia se produce tan solo dos semanas después de pasar de testigo a imputado en la Operación Brody, en la que se analizan las presuntas irregularidades en contratos de la RFEF desde 2018, durante el mandato de Luis Rubiales, al que ahora sucede.
La RFEF ha recordado que el acuerdo ha sido tomado por la Comisión Electoral, reunida este viernes, "en base al calendario que fue establecido para este procedimiento", y que, siguiendo lo dictaminado por la nueva Orden Electoral del Gobierno, "ha procedido a la proclamación directa del candidato que, de manera inmediata, pasará a ejercer como presidente de esta entidad".
El anuncio tiene lugar pese a su expediente por falta muy grave, y un día después de que el Consejo Superior de Deportes anunciase la creación de una comisión para supervisar todo el funcionamiento del ente federativo en los próximos meses.
Tras este nombramiento, Pedro Rocha, investigado en la Operación Brody, tendrá que convivir con la comisión de tutela anunciada ayer por el Gobierno. Pero no solo eso: también lo hará pendiente además de una posible suspensión; una situación inédita.
El Gobierno, concretamente, decidía ayer que una Comisión de Supervisión, Normalización y Representación creada por el Consejo Superior de Deportes (CSD), organismo dependiente del Ministerio de Educación, Formación Profesional y Deportes, tutelará durante los próximos meses el funcionamiento de la RFEF; una respuesta, según esgrimía el CSD en un comunicado , que responde a "la crisis de la entidad federativa" y actúa "en defensa del interés general de España".
"El Gobierno ha adoptado esta decisión para corregir la grave situación que atraviesa la RFEF y para que la entidad pueda iniciar una etapa de regeneración bajo un clima de estabilidad e institucionalidad", señalaba el organismo, avanzando que al frente de la Comisión "se situarán personas independientes de reconocido prestigio".
"La situación de la Real Federación Española de Fútbol exige altura de miras y el Gobierno está actuando con seriedad, determinación y responsabilidad. Con la creación de esta Comisión de Supervisión, Normalización y Representación, el CSD preserva el interés general, con el fin de restituir la reputación, el buen nombre y la imagen del fútbol español y culminar el proceso electoral con una Asamblea renovada para el periodo 2024-2028", apuntaba el presidente del CSD, José Manuel Rodríguez Uribes, al respecto.
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