La sangre de una perra salva la vida de una gata gracias a la rápida decisión de una veterinaria
Por xenotransfusión, intercambio de sangre entre 2 animales diferentes
Una veterinaria, identificada como Helen Spry, salvó la vida de la pequeña Ellie, una gatita de apenas 280 gramos que estaba a punto de morir. Su dueña, Maureen Franklin, de 68 años, llevó a la mascota a la clínica situada en Gateshead después de que el animal no pudiera ni levantar la cabeza, según recoge 20Minutos.
La pequeña Ellie se encontraba débil debido a la falta de glóbulos rojos, que provocaba que sus mucosas estuvieran blancas. Para salvar la vida de la gatita, Spry practicó una xenotransfusión, es decir, una transfusión de sangre entre animales de distinta especie.
El proceso se habría realizado sin riesgo con otro gato, pero no había tiempo para actuar. Bella, la propia perra de la veterinaria, fue la donante. La transfusión salvó la vida de Ellie, aunque al día siguiente, ya con más fuerzas, recibió sangre de otro gato que terminó por completar el proceso. La gata ya se recupera gracias a una rápida decisión.