Lejos de lo que pueda imaginar un espectador ajeno al negocio, la producción de una serie lleva meses y meses de trabajo, reuniones, intercambio de ideas, discusiones y reescrituras de guion antes de que suene el primer golpe seco de la claqueta. No ha sido el caso de Besos al aire.
La comedia romántica que comenzó a rodar la semana pasada Alea Media para Mediaset España surgió, allá por marzo, porque se cruzaron dos condiciones: los hospitales se estaban convirtiendo en el epicentro de la vida (y la muerte) y había un lugar donde contarlo, los decorados del centro sanitario donde transcurrían las tramas de Madres, drama también firmado por la productora creada por Aitor Gabilondo (San Sebastián, 1974). Ahí nació este homenaje a aquellos que cuidaron de todos nosotros en lo más negro de la pandemia, recordado con humor pero sin olvidar el drama y el duelo que todavía arrastramos.
En dos episodios, y con el personaje interpretado por Paco León como nexo común de ocho historias que se cruzan, Besos al aire tratará de recordarnos aquellos días en que éramos generosos, solidarios, cuando aplaudíamos a las 20.00 desde la ventana y mandábamos besos al aire al vecino del bloque de enfrente, horneábamos pan en casa o practicábamos yoga en casa por primera vez. “El miedo sacó lo mejor de nosotros”, apunta Gabilondo en un parón del rodaje. Aunque esa sensación durara “15 días” y hayamos vuelto a ser “lo que éramos”.
Besos al aire “intenta ver esa parte agradable de nosotros”. Encarnada principalmente en Javi, el personaje interpretado por Paco León, un auxiliar de enfermería que cree que su amor por la doctora Cabanas (Leonor Watling) es como el de una comedia romántica de los años 90 a las que es tan aficionado -"Paco León es nuestra Meg Ryan", bromea el productor ejecutivo-.
Además de este amor imposible, Javi es el catalizador de todos los sentimientos de la serie. Él es ese auxiliar de enfermería anónimo que, cuando el virus era más letal, hacía llegar a los pacientes de la UCI los mensajes de los familiares. El que, de vuelta de una guardia agotadora, se cruzaba en el portal con el vecino que se había agenciado un perro como salvoconducto para salir a la calle.
Además del hospital y del edificio de viviendas, un supermercado es otro de los escenarios donde suceden las tramas.
La estructura de Besos al aire recuerda a la de comedias románticas como Love actually, Love actually,aunque a Gabilondo también le gusta mencionar como referentes otras cintas con relatos más amargos, como Vidas cruzadas, de Robert Altman.
El guion de Besos al aire es de Darío Madrona, con quien ya trabajó Gabilondo en Vivir sin permiso y que firma otro de los éxitos televisivos de los últimos tiempos, Élite, drama juvenil de suspense de Netflix.
A León y a Watling les acompaña un reparto coral que cuenta, entre otros, con María León, Mariam Hernández, David Castillo, Nuria Herrero, Nancho Novo, Alejandro Tous, Gracia Olayo, Zoe Stein, Gloria Muñoz, José Ángel Egido, Pau Durá, Jaime Olías, Loreto Mauleón, Mariano Venancio, Ruth Díaz, Luna Fulgencio, Fran Berenguer, Ariana Martínez, Inma Isla y Alejandro Sigüenza.