Más de 5.000 estudiantes de primer año han firmado el contrato en el que renuncian a suicidarse al inscribirse en el City College de la Universidad de Tecnología de Dongguan, según ha publicado el portal China Org.cn.
El contrato presentado establece que los estudiantes asumen toda la responsabilidad y las consecuencias si se suicidan o se lesionan en la Universidad.
Los medios chinos han especulado que la medida está vinculada a una reciente riña entre dos estudiantes que terminó con el apuñalamiento de la chica que se negó a ser novia de su agresor.
Un funcionario de la universidad negó esta razón y aseguró que es sencillamente un "código de conducta en los dormitorios" y la firma implica que los estudiantes "cumplan con las reglas del centro y cuiden de sí mismos".
Algunos de los estudiantes, por su parte, mostraron su apoyo al contrato, porque muchos de los episodios de suicidios y autolesiones no tienen relación con la presión de los estudios, sino con problemas amorosos, antecedentes familiares y otros.
Un padre, preguntado por el asunto, criticó el contrato y acusó a la universidad de "pasar la pelota de las cosas que suceden en el campus", cuando ellos confían en que mandan a sus hijos a un ambiente seguro.