Rehan Baig, un hombre de 37 años de la ciudad inglesa de Bradford, ha sido condenado a tres años de prisión por mantener sexo con gallinas mientras era filmado por su mujer, Haleem Baig, con una cámara GoPro instalada en el sótano de su casa para capturar las imágenes de ambos complaciéndose. Las aves, marrones y blancas, que murieron como resultado de la actividad sexual, eran mascotas de la familia.
En la audiencia, el individuo se declaró culpable por un total de 11 cargos, incluidos tres por realizar un acto de penetración con varios pollos. Además, reconoció haber descargado imágenes pornográficas de menores de edad y relacionadas con actos sexuales con perros y pollos. También admitió la posesión de 405 miligramos de cocaína y 4,07 gramos de resina de cannabis.
El juez le dijo que su comportamiento había sido "depravado, despreciable y pervertido" y que había hecho que "cualquier miembro de la sociedad que pensara correctamente se sintiera mal del estómago".
Haleem, de 38 años, aseguró haber sido cómplice de las acciones enfermas de su esposo, pero se salvó de la cárcel después de que el magistrado escuchara que existían pruebas de que había sufrido abuso doméstico a manos de Baig.
Los delitos salieron a la luz después de una redada en la casa de la pareja, el 9 de julio del año pasado, por parte de la Agencia Nacional del Crimen, que actuaba con idea de que Baig tenía imágenes de abuso sexual de niños. Se incautaron y examinaron dos torres de ordenadores, una computadora portátil y un teléfono móvil y se recuperaron imágenes y videos de abuso infantil.
Sin embargo, los investigadores encontraron más de lo que esperaban cuando se dieron cuenta de los repugnantes actos con las gallinas y con un perro. La fiscal Abigail Langford dijo a la corte que "se encontraron imágenes en movimiento del acusado teniendo relaciones sexuales con penetración con varias gallinas". Hay otros ejemplos en los que Haleema se involucra en una actividad sexual con penetración con el acusado mientras él está a dos bandas entre las gallinas y su esposa.
Langford añadió que se encontraron imágenes fijas de la pareja involucrada en la actividad sexual con un perro, que no ha sido encontrado ni identificado y que no se cree que sea su propia mascota. Reham Baig animó al animal a realizar actos sexuales con él y su mujer. La fiscal apuntó que el abuso de gallinas no se había producido en una sola ocasión.