A sus 94 años, Grace Lee McClure Smith se ha convertido en la protagonista de su vida. Tuvo que dejar sus estudios cuando su marido se fue a la Segunda Guerra Mundial y ahora acaba de recibir su diploma de graduación. Su ejemplo demuestra que nunca es tarde para cumplir un sueño.
A sus 94 años, Grace Lee recibe su diploma y lanza el birrete al aire con alegría. Lo de esta mujer es sin duda el premio a la constancia. Dejó sus estudios a los 16 años cuando su marido se marchó para luchar en la guerra, pero siempre tuvo la escuela en su mente y en sus sueños.
Grace trabajó durante 30 años como conductora de autobús llevando y trayendo a niños a una escuela mientras soñaba con completar algún día sus estudios. Ahora 78 años después lo ha conseguido y lo celebró con una ceremonia en la que estuvieron presentes sus hijos, nietos y bisnietos.
No es la única que sigue adelante con sus proyectos, porque la edad no es más que un número. Si no que se lo digan a Amy, También a los 94 mostraba con orgullo su titulo universitario. El mes pasado era James, de 81 años, que se engalanaba, mascarilla, incluida, para graduarse en estudios cinematográficos.
Otro veterano, Way terminó su carrera universitaria cumpliendo una promesa que le hizo a su madre hace hace medio siglo y lo cumplió. Ejemplos de superación y toda una lección de vida. Si yo puedo hacerlo, cualquiera puede. Mejor tarde que nunca, aseguran estos mayores que van por la vida sin semáforos y con la quinta marcha puesta.