David, 25 años: "Me invento las cosas para parecer más interesante"

  • No necesitas mentir para caer bien, sino trabajar en tu autoestima para no tener la necesidad de inventarte cosas

Según un estudio llevado a cabo por la Universidad de Cornell, ocho de cada diez personas mienten en las aplicaciones para ligar. En realidad, no hace falta entrar en Tinder, todos hemos exagerado alguna vez la realidad para parecer más interesantes: en el currículum, al conocer a gente nueva, en la universidad, etc.

Nos gusta quedar bien, el problema surge cuando cruzamos el límite que separa el autoensalzamiento y las mentiras compulsivas. Esto es lo que le sucede a David, un chico de 25 años que desde hace varios meses acude a terapia para entender por qué miente para elevar su autoestima y, sobre todo, para poder superarlo.

El caso de David (25 años):

"Casi todos mis amigos saben que voy al psicólogo, suelo contarlo abiertamente, pero sólo un par saben la razón. Al resto les digo que es por problemas de autoestima. En realidad, es cierto, pero lo que me hizo ir al psicólogo fueron mis mentiras.

Mi exnovia se dio cuenta de que me inventaba bobadas, cosas tan absurdas como haber sacado un 8 en vez de un 7 en un examen, o como decirle que había quedado con mis amigos cuando en realidad estaba en casa. Lo hacía por parecer más interesante, y como eran mentiras sin importancia no creí que fuese tan malo hacerlo.

Cuando se enteró decidió cortar conmigo. Me dijo que todas mis mentiras le estaban volviendo a ella insegura, porque se comía la cabeza pensando qué era cierto y qué no. Fue muy duro, pero la ruptura me hizo dar el paso y pedir ayuda.

En terapia me di cuenta de que llevaba mintiendo con cosas así toda la vida. Por ejemplo, a mis amigos les decía que había conseguido subir de nivel en algún videojuego cuando era mentira, o que me había comprado cosas que en realidad no tenía. Eran tonterías. Me inventaba historias en las que yo quedaba bien, pero era tan obvio que mentía que daba pena a los demás.

Ahora en el psicólogo me he dado cuenta de que no tengo que basar mi autoestima en cosas ficticias. La gente tiene que conocerme por como soy, y si no les gusta no pasa nada.

Por qué algunas personas mienten para gustar

Para entender por qué mentimos para gustar, el primer es ser conscientes de lo negativo de esta conducta. Se trata de un círculo vicioso abocado al fracaso porque tarde o temprano la gente se enterará de la realidad. Además, al mentir no construimos las bases de una relación basada en la confianza. Simplemente diseñamos una vida ficticia de acuerdo a lo que creemos que los demás quieren oír. No estamos permitiendo que nos conozcan.

Una vez nos demos cuenta de que mentir no lleva a nada, es el momento de deconstruirnos y entender por qué lo hacemos.

Una de las posibles razones es un déficit de habilidades sociales. Las situaciones interpersonales son complejas, y a veces el miedo a causar mala impresión puede jugarnos una mala pasada. Si no sabes cómo actuar, puedes pedir ayuda a tus amigos. Explícales que te sientes inseguro y pregúntales por sus trucos para caer bien.

tra razón es una autoestima baja. A veces no somos conscientes de lo que valemos por malas experiencias en el pasado, porque nos comparamos con personas que creemos superiores, o porque somos demasiado autoexigentes. Vivimos en una sociedad que nos impulsa a la perfección. Hay que ser los más atractivos, los más populares, los más inteligentes y los más divertidos. En primer lugar, todo no se puede, y en segundo lugar, ser perfecto no es compatible con ser único.

Cada persona tiene determinadas fortalezas y determinados puntos débiles. No pasa nada. No es necesario impresionar a nadie, sobre todo cuando para conseguirlo necesitas inventarte datos falsos. Actúa tal y como eres, porque así te aseguraras de que la gente te quiera por ser tú mismo, y no por ser un personaje ficticio que has creado como si de una novela se tratase.

Si las mentiras han dominado tu vida o bien por un déficit de habilidades sociales o bien por falta de autoestima, pide ayuda psicológica.