Las cámaras de seguridad del metro de Phoenix grabaron unas escenas de lo más cruel, un ladrón zarandeando y golpeando a una mujer que iba en silla de ruedas, para robársela. En las imágenes se aprecia a la mujer que intenta desde el suelo con todas sus fuerzas agarrar la silla, pero el ladrón sin alma, termina por llevársela.
El agresor huye, pero no logra llegar demasiado lejos con la silla gracias al resto de pasajeros. Las cámaras de seguridad y la colaboración ciudadana han permitido dar con el ladrón y detenerlo.