Fiona Presly, asistente de biblioteca en Iverness, Escocia, se ha convertido en heroína en las redes sociales después de darle una segunda oportunidad a una abeja reina que, por una extraña enfermedad, no ha podido desarrollar sus alas.
La mujer encontró al insecto mientras trabajaba en el jardín de su domicilio y, rápidamente, notó como la abeja no estaba bien. No tenía alas y solo podía caminar como si de una hormiga se tratase. Sin embargo, Presly no lo dudó e hizo todo lo que estuvo en su mano para cambiarle la vida.
"Las personas tienen un vínculo con su perro o gato e incluso con su hámster. Creo que demostré aquí que puedes tener una relación con un insecto", asegura a American Upbeat.
Construyó un mini jardín totalmente protegido para que Bee, como llamó a la abeja, pudiera vivir sin ningún peligro, como ella misma ha compartido en su cuenta de Facebook. Desde que encontrara a su nueva 'amiga' el pasado año, Presly se ha convertido en sensación en la Red por su humanidad al cambiarle la vida a la abeja reina.