Este perro parece dispuesto a compartir su hueso de juguete con su compañero. Sin embargo, este no es real, se trata de su propio reflejo y el can no puede cumplir con su deseo. Su dueño, Eric Smith compartió en las redes el momento de frustración que sintió el animal al descubrir que era imposible que el otro pudiese disfrutar de su juguete.