En un momento en que cada vez más mujeres deciden aumentarse el pecho (60.000 operaciones al año solo en España), la noticia llega cuando alguien decide reducírselo, como fue el caso de Soraya Arnelas, o retirarse los implantes mamarios, como ha hecho Raquel del Rosario.
La cantante y ex vocalista de El sueño de Morfeo compartió en redes sociales su decisión de revertir la operación que se hizo hace 13 años, recuperando así el busto natural que tenía en 2008. En su caso, por "coherencia personal", y también por miedo al cáncer que se asocia a los implantes mamarios, que le quitaba el sueño.
“Colocamos estas bombas de relojería sobre nuestro pecho y nuestro corazón”, confesó en la publicación de Instagram en la que se muestra feliz tras haber recuperado su imagen anterior a su operación estética.
Raquel del Rosario es la última de una serie de famosas que decidieron dar marcha atrás en su aumento de pecho, ya sea por motivos de salud o estética.
La actriz de Eyes wide shuto Big Little lies se quitó los implantes en 2016, dos años después de haberse operado, cuando salieron a la luz los peligros de la silicona y acababa de terminar la lactancia de su hija, Sunday Rose.
Tal y como contó ella misma, se los puso por estética, porque le gustaba posar con un escote atrevido, pero se los quitó por miedo a tener cualquier tipo de sustancia tóxica en su cuerpo.
Dos años antes que Nicole Kidman, la ex Spice Girl Victoria Beckham también confesaba en una entrevista con Allure que se había deshecho de sus implantes mamarios, porque no se veía natural con ellos. "Ya no los tengo. Creo que podría haberlos comprado", bromeó.
Según el New Zealand Herald, en 2011, la mujer de David Beckham dijo que "parecían dos misiles de bazuca". Y más recientemente, en 2017, publicó una carta a su yo de 18 años en Vogue UK donde recomendaba a su pasado adolescente: "No toquetees tus tetas. Celebra lo que tienes".
La ex ‘vigilante de la playa’ fue pionera en ser icono de un busto grande, y también, en renunciar a serlo, ya que fue en 1999 cuando se quitó las prótesis tras muchos años con ellas. "Soy bajita y no me veía bien con esos pechos enormes, llevaba tiempo deseando quitármelos", confesó a Entertainment Tonight.
Aunque no lo hizo por razones de salud, sino por estética, en el mismo programa desveló después que durante la operación encontraron una fuga en una de ellas.
El pasado noviembre, la 'reina del pop' dio a entender que se había quitado los implantes, a sus 63 años. Lo hizo a través de estas imágenes de un ritual de espiritualidad, una foto de Frida Kahlo, implantes de sus senos y este texto: “Llama a tus ángeles, invita a tu musa eterna, dejar ir lo que no necesitas y ten certeza de que ya eres perfecta".
La actriz de 50 años), protagonista de películas como Criaturas salvajes o Starship Troopers, y de series como la que rodó con José Luis Moreno, recuperó su busto natural con 27 años, ocho años después de aumentárselo, con 19.
No quedó satisfecha con su primer paso por el quirófano, ya que los implantes eran más grandes de lo que ella quería. Con 27 años se los redujo, y después, en una tercera operación, se los retiró del todo, consiguiendo su antiguo look natural.
La recordada actriz de La casa de la pradera La casa de la praderavolvió a sus pechos naturales en 2015, tras 20 años con implantes, en lo que para ella fue “la decisión más inteligente que tomé en mi vida”. Lo hizo por salud y por coherencia, en un momento en que también renunció al bótox y otros retoques de rejuvenecimiento.
"Ahora soy más feliz sin estos pechos que eran dañinos para mi cuerpo". "¿Qué voy a hacer con 80 años cuando necesite una prótesis de cadera y además un cambio de pechos? Es inevitable, tienen fecha de caducidad", reflexiona ahora.
La modelo y mujer del cantante John Legend se quitó hace un año las prótesis que se puso hace ya una década para recuperar su pecho natural, tal y como comunicó en su Instagram. Según contó en la edición británica de Glamour, su intención era hacerlo en marzo de 2020, pero la crisis del coronavirus le obligó a posponer sus planes.
"¡No os preocupéis por mí! Está todo bien. Todavía tendré tetas, pero serán solo grasa, que es de lo que se componen en realidad. Un absurdo y milagroso saco de grasa", dijo en una publicación posterior de Instagram.
La hija del famoso productor Aaron Spelling, conocida por su papel en Sensación de vivir, se arrepintió de haberse operado muy joven, confesó hace una década en el programa Good Morning America, después de ser madre. "Me puse pechos a los veintipocos; si hubiera sabido que podría afectar la producción de leche materna, no lo habría hecho”. Volvió al quirófano en 2014, con 42 años, para retirárselos por recomendación médica, contó en su reality show True Tori.
De la actriz mexicana siempre se ha dicho que se aumentó los pechos al protagonizar Frida, y que luego se los retiró. Sin embargo, ella siempre ha dicho que nunca pasó por el quirófano, que su busto es natural, y que si a veces parece más grande (como en los Globos de 2020) o más pequeño, es por temas hormonales o bajadas y subidas de peso.
Aunque lo más frecuente es pasar por el quirófano para aumentarse el pecho, también hay famosas que deciden hacer lo contrario, como la cantante Soraya Arnelas. Los problemas de columna derivados del tamaño de sus senos llevaron a la ex ‘triunfita’ a una mamoplastia de reducción en 2012.
Scarlett Johanson también redujo su seno por motivos de estética y laborales, ya que quería que le dieran papeles más variados, no solo del estereotipo de mujer sexy.
La actriz Angelina Jolie se hizo una doble mastectomía por prevención para evitar un posible cáncer hormonal hereditario. "Una vez que supe que esta era mi realidad decidí actuar y minimizar el riesgo al máximo. Tomé entonces la decisión de hacerme una doble mastectomía preventiva. Comencé con los pechos dado que el riesgo que tengo de padecer cáncer de pecho es mayor que el de cáncer de ovario, y la cirugía es más compleja", contó la ex mujer de Brad Pitt.