Una enfermera compra productos en una máquina con la tarjeta de una paciente muerta minutos antes

  • Ayesha Basharat, de 23 años, atendía a enfermos de covid en un hospital de Birmingham

  • Entre el fallecimiento y el lamentable hecho tan sólo transcurrieron 17 minutos

  • Basharat eludió la cárcel con dos condenas de cinco meses, ambas suspendidas

Ayesha Basharat es una asistente sanitaria, de 23 años, ocupada de atender a los enfermos de coronavirus en el Hospital Heartlands de Birmingham (Inglaterra). Su nombre ha saltado a los medios de comunicación por un triste hecho que tuvo lugar el pasado 24 de enero. La joven usó la tarjeta bancaria, de 83 años, para comprar patatas fritas, dulces y bebidas gaseosas en una máquina expendedora.

Entre el deceso y las imágenes en la que se puede ver a Basharat delante de la máquina, adquiriendo seis productos de una libra esterlina (1,16 euros), tan sólo transcurrieron 17 minutos. Esa noche, la trabajadora hizo otra compra de una libra antes de intentarlo de nuevo cuatro días después cuando regresó al trabajo, el 28 de enero. Pero para entonces la tarjeta había sido cancelada, informa Birmingham Live.

La joven todavía tenía la tarjeta bancaria de la paciente cuando fue arrestada por la Policía mientras cubría su turno. Ella alegó que había encontrado la tarjeta en el suelo y que se había confundido, pensando que era suya, a pesar de que las tarjetas eran de diferentes colores. Basharat tampoco siguió el protocolo del hospital en torno a la propiedad perdida.

Ayesha admitió el robo y el fraude por representación falsa en el Tribunal de la Corona de Birmingham este miércoles y recibió dos condenas de cinco meses para ejecutarse simultáneamente, ambas suspendidas durante 18 meses. De este modo, eludió ir a prisión.

El oficial de investigación Andrew Snowdon, de la Policía de West Midlands, dijo: "Esto fue una abominable violación de confianza y angustiante para la familia de la víctima. Estaban teniendo que aceptar la muerte de un ser querido por covid-19 cuando encontraron que faltaba la tarjeta bancaria". Añadió que "le deseo a la familia todo lo mejor para el futuro y espero que puedan superar este episodio perturbador".

Un portavoz hospitalario aseguró que "Ayesha Basharat fue suspendida inmediatamente cuando este suceso salió a la luz. Queremos ofrecer nuestras condolencias a la familia de la paciente y disculparnos sinceramente por su experiencia. Este incidente es vergonzoso y claramente no cumplió con los altos estándares de integridad que todos esperamos de los empleados del NHS (Servicio Nacional de Salud británico)".