El hombre, al que los medios solo identifican como Chen, que había solicitado el documento legal en una comisaría de Panyu Fuhua, a finales del pasado mes de julio, cuando se llevó la sorpresa, según lo que publicó South China Morning Post.
El documento que le mostró la policía aparece otro hombre con sus mismos datos personales, incluido número de identidad, condenado a muerte por un tribunal de Guangzhou en 2003, y ejecutado en 2006.
Chen, por su parte, no se explica el error y asegura haber mantenido una vida sin sobresaltos, a pesar de haber sido ejecutado. Incluso dice haber viajado fuera de China sin problemas.
La Policía ha rectificado su base de datos y ya ha emitido el certificado de penales correctamente.