Un coche destrozado, con un cadáver en su interior. Es lo que se encuentran los conductores que circulan por una sinuosa carretera en Estados Unidos. En realidad se trata de la "peculiar" manera que ha encontrado un hombre para concienciar de la gran cantidad de accidentes registrados en ese punto.
El coche destrozado, las ventanas reventadas, y en su interior un cadáver sangriento o al menos, eso es lo que parece. El brutal accidente es, realmente, una particular creación de un vecino, Francis Wayne que vive al lado de la carretera y quiere aportar algo a su comunidad.
Cuenta que ha perdido a su perro atropellado por un coche y muchas veces "han estado a punto de darme a mí conductores que no prestan la debida atención. Por eso ha hecho este tétrico montaje para que el mensaje quede muy claro: nada de móviles al volante, la consecuencia puede ser terrorífica, asegura.
En realidad es solo un recordatorio. Para seguir adelante y dejar el móvil a un lado para evitar sustos. Muchas personas, al verlo, han llamado a emergencias, porque pensaban que era real. Ni Wayne esperaba que pareciese tan auténtico.
La Policía no ha agradecido su iniciativa y le ha pedido que lo elimine, pero, guste o no, su macabra creación ha hecho que los accidentes en esta carretera hayan disminuido.