Un extraño suceso en el municipio coruñés de Ferrol ha dejado sembrado de centenares estorninos un tramo de la calle Alcalde Quintanilla y los jardines traseros del hospital Juan Cardona, en el barrio de Caranza. Las aves cayeron de repente como una lluvia sobre las cabezas de algunos viandantes, de los coches que estaban aparcados y de alguno que iba circulando, lo que provocó un gran sobresalto para los conductores.
El hecho movilizó a efectivos de la Policía, que procedieron a la retirada de las aves hacia las aceras. El asunto pasó a manos de la Consejería de Medio Ambiente, desde la que se informó de que un técnico se desplazó a Ferrol y recogió dos aves muertas para trasladarlas al centro de Oleiros y realizar las oportunas analíticas con el objetivo de determinar las causas de este fallecimiento masivo.
En un primer recuento se contabilizaron más de dos centenares de estorninos muertos, pero había más en los jardines del hospital, debajo de los coches y en el cierre vegetal del centro sanitario.
Antonio Martínez, un vecino de la zona, manifestó al diario La Voz de Galicia que cuando todavía estaba en la cama oyó un estruendo, pero no le dio importancia porque creyó que se trataba de un trueno. Cuando más tarde se asomó a la ventana ya vio toda la calle sembrada de pájaros muertos. Este hombre explicó que los estorninos pernoctaban en los árboles de los jardines del hospital.
Por otra parte, dos trabajadores del servicio de limpieza viaria de Ferrol que prestan servicio en el barrio de Caranza aseguraron que a las 6:30 horas se escuchaban sus trinos como cualquier otro día y que más tarde, cuando volvieron a pasar por la zona, ya se encontraron con los pájaros muertos.
Un testigo de la 'lluvia' de estorninos, José, señaló al mencionado diario que se dirigía a su trabajo cuando, de repente, de los árboles del jardín del hospital Juan Cardona se produjo la gran desbandada. "Más de mil salieron volando hacia los edificios de las torres y otro grupo de alrededor de 200 lo hicieron hacia las casas rosas -son las situadas en la calle Alcalde Quintanilla, enfrente del recinto hospitalario- y comenzaron a caernos por encima, tanto a mi como a otra chica que también iba por la calle y quedamos flipados", relató José, añadiendo que antes de la estampida no oyeron ni vieron nada extraño.
Dentro de los trabajos periódicos de control de la población de aves en la ciudad, la empresa Locus Avis había localizado una pequeña bandada de estorninos de unos treinta ejemplares en la zona del campus universitario, pero en los demás dormideros catalogados en Ferrol no se había detectado la presencia de estas aves. Un vecino de la calle Alcalde Quintanilla indicó que los pájaros llevaban tres noches durmiendo en los árboles de los jardines traseros del hospital Juan Cardona.