Dos de los peces aparecieron en la misma orilla, mientras que el tercero, de cuatro metros de longitud, se enredó en una red de pesca en el puerto de Imizu.
Los científicos afirman que no existe un vínculo definitivo entre los avistamientos de peces y sismos, pero otros admiten que es posible que estas especies puedan sentir desastres naturales.
El sismólogo japonés Kiyoshi Wadatsumi resalta que los peces de aguas profundas son criaturas "muy sensibles a movimientos irregulares" del fondo marino, tal y como recoge 'RT'. Es probablemente por esa razón que, en la creencia popular, la aparición de este tipo de ejemplares en las orillas de la playa se asocie con la inminencia de una catástrofe natural.
No solo los japoneses consideran el avistamiento de peces de aguas profundas presagios de desastres naturales. En mayo pasado una enorme criatura sin vida de unos seis metros de largo aparentemente cubierta de pelo apareció en una playa de Filipinas, incitando a algunos lugareños a rezar por temor a la llegada del Apocalipsis.