Parece una telenovela, pero es una historia real. La de una mujer y un hijo asesinados sin pistas; un reconocido abogado que contrata a un excliente para que lo mate y detrás de todo el culebrón un seguro de vida millonario para el único superviviente de esta historia con tintes criminales. Al final, a Alex Murdaugh el plan que parecía perfecto le salió mal.
Alex Murdaugh, un destacado abogado de Carolina del Sur, se puso de acuerdo con un conocido para que le disparara en la cabeza, con el objetivo de que su hijo pudiera cobrar un seguro de vida de 10 millones de dólares, según las autoridades.
Murdaugh, que sobrevivió al disparo del 4 de septiembre, admitió ante la Policía la conspiración orquestada por él mismo para estafar al seguro. El abogado de 53 años lo declaró y aunque no se han anunciado cargos contra él se enfrenta a cargos de fraude y por mentir a las autoridades.
Murdaugh supuestamente proporcionó a Curtis Edward Smith, de 61 años, del condado de Colleton, un arma de fuego y le pidió que le disparara en la cabeza, según la declaración jurada. El propósito del plan era que Smith matara a Murdaugh para que su hijo pudiera cobrar el seguro de vida, de acuerdo con la declaración jurada.
Murdaugh llamó al 911 para informar de que le habían disparado en una carretera del condado de Hampton, según un comunicado de la investigación policial. Fue trasladado a un hospital de Savannah (Georgia), al presentar una "herida superficial de bala en la cabeza". A la semana siguiente, un portavoz de la familia emitió un comunicado en el que indicaba que la herida era más grave y esbozaba más detalles del incidente.
"Alex se detuvo tras ver una luz indicadora de neumático bajo. Un conductor de una furgoneta azul le preguntó si tenía problemas con el auto y, tan pronto como Alex respondió, le dispararon", dice el comunicado.
Alex Murdaugh estaba en una "depresión masiva" después de que su mujer Maggie, de 52 años, y su hijo Paul, de 22 fueran asesinados el pasado mes de junio. Poco después falleció su padre de cáncer.
Así lo explicó su abogado en un programa de televisión en el que dijo que su cliente estaba en una "depresión masiva" y desintoxicándose de opioides cuando conspiró con un hombre de la zona para matarlo.
"Fue un intento de hacer algo para proteger a su hijo", aseguró Dick Harpootlian, abogado defensor de Murdaugh.
A Curtis Edward Smith, de 61 años se le acusa de suicidio asistido; conspiración para cometer fraude al seguro; apuntar y disparar un arma de fuego; y asalto y agresión de naturaleza elevada y agravada, según la División de Aplicación de la Ley de Carolina del Sur, o SLED por sus siglas en inglés.
Smith declaró este martes que estuvo presente en el disparo contra Murdaugh y que se deshizo del arma de fuego. Se esperan cargos adicionales en el caso. A Smith también se le acusó de distribución de metanfetamina y posesión de marihuana.
En al menos dos ocasiones que se remontan a 2010, Alex Murdaugh representó a Curtis Smith como su abogado, según muestran los registros judiciales del Decimocuarto Circuito Judicial del condado de Colleton. Se cree que este hombre le proporcionaba la droga a Murdaugh.