Nada más iluminarse la pantalla, los ojos de Carlos Miralles, fundador y propietario del Drive-In de Denia (Alicante), comienzan a humedecerse. La emoción es solo comparable a la de aquella noche del 9 de junio de 1979, en la que tras mucho trabajo y esfuerzo, cumplió el sueño de inaugurar este mítico autocine, el más antiguo de España. Y no es para menos. Después de dos meses en blanco, su pantalla ha sido la primera de nuestro país en la que se ha proyectado cine de nuevo. "Nunca habíamos cerrado tanto tiempo en las últimas cuatro décadas. Estos dos meses los he vivido como una tragedia. Tenemos ganas de películas que nos hagan felices y con ese ánimo abrimos", explica.

Un reestreno que Carlos ha compartido este jueves con su hijo, que ahora gestiona el negocio, y con un centenar de privilegiados clientes, la mayoría familias y parejas, que desde el interior de una treintena de coches han sido los primeros en disfrutar del regreso del cine a la pantalla grande. "Ojalá este sea el resurgir de nuestro autocine", dice Carlos visiblemente emocionado.

Para poder abrir de nuevo, el autocine ha tenido que adaptarse a los nuevos tiempos que marca el coronavirus. En su explanada, el aforo ha quedado reducido al 30 % de su capacidad, para garantizar la distancia de seguridad entre los vehículos. Y aunque su bar sigue sirviendo bocadillos, bebidas y palomitas, la barra ha tenido que cerrar y la terraza ha quedado reducida a unas pocas mesas.

Unos cambios que no han impedido que la pasión por el cine se mantenga. Es el caso de Carla, cliente habitual, que junto a una amiga no ha querido perderse esta histórica premiere. "Venimos durante todo el año. Adoramos el autocine. Es la felicidad absoluta. Sesión doble, cena y al lado del mar", relata.

Unos coches más allá, Patricia, su marido y sobretodo, sus hijos, de 7 y 10 años, no apartan la mirada de la pantalla donde se proyectan "Los Minions". "Es la primera vez que venimos, teníamos mucha ilusión después de tantas semanas de encierro", asegura.

Entre los vehículos, uno de los empleados del autocine, recorre la explanada con una bandeja repleta de bocadillos recién hechos. Para evitar riesgos a los espectadores, la cena la sirven ahora directamente desde la cocina a los coches. "El plan es perfecto. No hace falta bajarse del coche. Las entradas las hemos comprado online, te traen la comida y disfrutamos de las películas seguros", explica Juan, que ha venido con su novia, y sus dos sobrinos, felices con sus refrescos y un cubo de palomitas.

Con las distribuidoras cerradas y sin estrenos que proyectar, Carlos Miralles hijo, puso en marcha a través de sus redes sociales una encuesta para preguntar a sus clientes qué películas de los años 80, 90 y 2000, les gustaría volver a ver en pantalla grande. "La respuesta ha sido espectacular. Nos han hecho muchas peticiones", explica. Entre ellas las dos películas que han proyectado este jueves inolvidable. "Los Minions" y la primera parte de "Jurassic Park". "Es muy complicado acceder en estos momentos a películas en formato cine. Pero estamos haciendo un gran esfuerzo para seguir ofreciendo a nuestros clientes las películas que quieren y devolverles algo de ilusión en estos momentos tan difíciles".