Según informa la revista People, O’Connor anunció en Facebook que “no estoy en casa, estoy en un hotel, en un lugar de Irlanda, con otro nombre”. “Si no escribiera esto mi familia no me encontraría”, afirma, "podría estar muerta desde hace quince días y nunca se habría sabido".
Las autoridades irlandesas han anunciado que la actriz ha sido localiza sana y salva en Dublín. “Esto es más de lo que una mujer puede soportar”, dice. La cantante, además, asegura que su familia la ha traicionado y les acusa de tratarla con una “crueldad atroz”.
La cantante se refiere en la nota a la batalla que libra con dos de sus exmaridos por la custodia de sus hijos pequeños, Shane Lunny, de 11 años, y Yeshua Bonadio, de ocho.
O’Connor afirma en su mensaje que estaba desesperada y necesitaba “un trabajo y un lugar para vivir”. “Estoy siendo tratada tan mal por mi familia que apenas puedo llegar a mantenerme con vida”, agregó.