El catalán ofreció un recital de casi una hora y media en el que repasó sus temas clásicos, cantó en catalán y tuvo un recuerdo para la música popular chilena.
Serrat saltó por cuarta vez en sus más de cuarenta años de trayectoria musical al escenario de la Quinta Vergara, ataviado con unos tejanos y una chaqueta de cuero y acompañado por cinco músicos.
"Se equivocó la paloma", un poema de Rafael Alberti, fue el primer tema que interpretó el músico, tras lo que se presentó ante las más de 15.000 personas que abarrotaban el recinto de la ciudad balneario: "Bienvenidos todos a nuestra casa".
Otro poema, esta vez "Caminante no hay camino", de Antonio Machado, protagonizó la siguiente canción de Serrat, ampliamente coreada por el público.
Acostumbrado a escenarios más reducidos, el veterano artista no se dejó intimidar por la envergadura del recinto ni del evento, y pese a la frialdad inicial de los espectadores, ofreció un espectáculo digno de la trayectoria del 'Nano'.
Sonaron temas como "No hago otra cosa que pensar en ti", "Penélope" o "Poema de amor" antes de que Serrat se animara a enfundarse la guitarra y entonar un himno al optimismo, como "Hoy puede ser un gran día".
En un escenario como la Quinta Vergara y en la edición 50 del certamen más famoso de América Latina, un cantautor comprometido social y políticamente como el catalán no se olvidó de la música popular de la región.
Tuvo un recuerdo para Violeta y la saga de los Parra, Los Quilas, el gitano Rodríguez y Víctor Jara, de quien interpretó su canción "Un cigarrito".
Tras cantar "Mediterráneo", uno de sus grandes éxitos, Serrat anunció que había llegado la hora de lanzarse con un tema en su lengua natal, y trató de explicar a los chilenos qué significa, a su juicio, ser catalán.
"(Ser catalán) no es una perversión", dijo entre las risas del público, tras lo que añadió: "Tenemos fama de ser un pueblo laborioso, un poco atracado y loco".
El público disfrutó relajadamente del recital, especialmente los mayores de 40 años, una generación más próxima a la música del artista.
Después de que sonara "Fiesta" los presentadores del certamen entregaron a Serrat, a instancias del público, la antorcha de plata, uno de los galardones del festival.
El catalán puso así el broche de oro a la primera actuación del certamen, y dejó paso al trío mexicano Camila y la banda chilena La Noche.