El salón del Manga rinde homenaje a Osamu Tezuka en su 25 aniversario
El Museu Nacional d'Art de Catalunya (MNAC) recoge una amplia muestra del autor conocido en Japón como el Dios del Manga.
El salón del Manga de Barcelona cumple 25 años y lo celebra rindiendo homenaje al ‘mangaka’ y animador japonés Osamu Tezuka. Uno de los autores más importantes de la historia de este estilo de narración y al que en su propio país conocen como “el Dios del Manga”.
La obra del escritor, ilustrador y animador japonés se expone estos días en el Museu Nacional d'Art de Catalunya (MNAC) y podrá visitarse hasta el próximo 6 de enero de 2020. La muestra cuenta con 200 piezas originales de uno de los autores más influyentes en la historia de este género.
Tezuka nació en Osaka en 1928 y murió en Tokio en 1989 a causa de un cáncer estomacal. Empezó a dibujar muy joven y sufrió los horrores de la Segunda Guerra Mundial en su Japón natal, algo que dejó un profundo poso en su obra posterior. A Tezuka se le considera como uno de los autores que más contribuyó a popularizar el Manga en Japón y que ayudó a difundirlo por el resto del mundo. Fue él quien llevó al género a alcanzar una gran popularidad en la sociedad japonesa de postguerra y quien se fijó en los trabajos de animadores como Walt Disney para desarrollar la industria del ‘anime’ en su país. Una influencia recíproca en la compañía del ratón Mickey, dicen algunos, que no han pasado por el alto el parecido del personaje de ‘Simba’ de la película de 1994 ‘El Rey León’ con el de ‘Kimba, el león blanco” de Tezuka, dibujada en 1950.
Otros de sus personajes más conocidos son ‘Astroboy’ o ‘la princesa caballero’. A lo largo de su extensa carrera Tezuka dibujó y escribió alrededor de 700 mangas, más de 150.000 páginas, y realizó más de 60 películas.
No sólo fue el propio Tezuka quien llevó sus mangas a la gran pantalla. Otros grandes autores del género también las usaron para superproducciones del anime. Es el caso de la versión de la ‘Metropolis’ de Frtiz Lang que Tezuka dibujó en 1949 y que llegó a los cines en 2001 dirigida por Hayashi Shigeyuki (Rintaro) y guionizada por el creador de obras tan importantes como ‘Akira’ o ‘Pesadillas’, Katsuhiro Otomo.
"Osamu Tezuka decía que el manga no tenía fronteras, que podía emocionar a todos por igual y con esta exposición su sueño se cumple” ha dicho su hijo Makoto Tezuka en la inauguración que rinde homenaje a su padre en Barcelona.
La muestra, según el hijo del autor, no es sólo una recopilación completa de la trayectoria artística de Tezuka sino una vía para "acercarse al pensamiento japonés, comprender mejor la cultura y aquellas cosas que definen el pueblo de Japón".
La exposición recorre las diferentes etapas del artista, sus primeros pasos, el universo de personajes que deriva en la creación de un 'star-system' del manga y la influencia de Walt Disney que le llevó a revolucionar el manga animado, convirtiéndose en el exponente de la primera serie semanal de animación y la primera serie en color de anime en Japón. Entre las obras expuestas están sus personajes más reconocibles, los ya mencionados ‘Kimba, el león blanco’, ‘Astroboy’, pero también otros como el cirujano oscuro ‘Black Jack’.
Tezuka fue también el primer ‘mangaka’ que apostó por crear historias largas, con grandes arcos de desarrollo de personajes. Lo que él mismo bautizó como 'story-manga' y que contrastaba con el dominio del manga humorístico, representado siempre en historias autoconclusivas de pocas páginas o viñetas. Su trabajo supuso un punto de inflexión y marcó un cambio en el género, un legado que se percibe en la muestra y que aún retumba en las creaciones de la actualidad.