{{#section.link.href}}
{{section.link.title}}
{{/section.link.href}}
Los caminos de la Fuerza son casi infinitos. Más de 40 años de Star Wars dan para mucho, mucho material en una galaxia muy, muy lejana. Con once películas, seis series de televisión, decenas de videojuegos y cientos, por no decir miles, de cómics y novelas, no resulta fácil llegar al grado de maestro en la orden del fandom de Star Wars. Para conocer a Ahsoka Tano en profundidad, y amarla como lo hacen la inmensa mayoría de los fans hay que ser, por lo menos, un 'padawan' avanzado o haber ascendido al rango de caballero.
Ahsoka Tano no ha salido en ninguna de la películas, aunque lo merecía, no es una Jedi, aunque estuvo en la orden, y no será un personaje de acción real hasta que la veamos, casi con toda seguridad, este viernes 27 de noviembre, encarnada en la actriz Rosario Dawson.
Su nombre sí ha aparecido ya en la serie 'The Mandalorian'. Lo pronunció en el episodio 11 la heredera a la que hacía alusión el título del capitulo. La heredera a liderar Mandalore, Bo-Katan Kryze, interpretada por la misma actriz que lleva años prestándole su voz al personaje en las series de animación 3D 'The Clone Wars' y 'Rebels', Katee Sackhoff.
Su aparición, si se cumplen todos los pronósticos, será en el próximo capitulo que llevará por título 'The Jedi' y que ha sido escrito y dirigido por Dave Filloni, el hombre que la dio vida para sus series animadas
Filloni, junto al director y actor Jon Favreau, es uno de los dos principales responsables de 'The Mandalorian'. En la serie escribe, dirige, supervisa y hace sus pinitos como actor interpretando a un piloto de ala-X de la Nueva República. Su rol en la creación del universo de Star Wars viene de lejos. Él fue el elegido por George Lucas para ponerse al frente de la serie de animación en 3D 'The Clone Wars' en la era de las precuelas, allá por los inicios de los años 2000.
En aquella serie, enmarcada entre los episodios II y III de la saga, 'El ataque de los clones' y 'La venganza del Sith', Filloni introdujo a una niña que haría las veces de 'padawan' de Anakin Skywalker. La primera vez que la vimos fue en la película animada que se estrenó en cines, y que funcionaba como una suerte de episodio piloto de la serie.
Ahsoka, hay que reconocerlo, no entró con buen pie, la película era demasiado infantil, su personalidad era la de una mocosa respondona y rebelde y su personaje no pasaba del de niño repelente y cargante que no aporta nada. No fue un buen estreno, pero lo bueno de las series es que hay tiempo para cambiar las cosas y desarrollar a los personajes. Eso es lo que hizo Dave Filloni, que ha acabado por convertirla en algo así como su personaje fetiche.
Ahsoka es la niña de sus ojos y la ha cuidado otorgándole un arco de desarrollo de una profundidad y un detalle que la han acabado convirtiendo en uno de los personajes más queridos por el fandom de Star Wars.
“La inspiración de Ashoka vino de Mononoke", la película de animación japonesa del Estudio Ghibli dirigida por el maestro Hayao Miyazaki en 1997. Lo reconoció su creador en el panel Ahsoka’s Untold Tales de la Star Wars Celebration de Europa en 2016.
Su referente fue, específicamente, el personaje San, "Es fácil conectar los dos puntos" comentaba Filloni: "San es una joven entrenada en los caminos místicos de la naturaleza y el bosque por lobos. Fue separada de sus padres a una edad temprana y tuvo que aprender una forma de vida significativamente diferente a la suya. Tanto San como Ahsoka son feroces e independientes y se conectan espiritualmente con la vida y la naturaleza".
Pero Ahsoka no sólo toma de San sus orígenes y su carácter, también la forma en la que se mueve. "Durante una secuencia de 'La princesa Mononoke" San invade la Ciudad del Hierro corriendo de un tejado a otro a toda prisa. Si ves muchas escenas de Ahsoka peleando puedes ver este estilo de movimiento filtrándose en Star Wars", sentenciaba su creador.
En 'The Clone Wars' Ashoka es una prueba que el Consejo Jedi le pone a Anakin, un padawan (aunque él mismo también lo es, de Obi Wan Kenobi), para que aprenda a aplacar su carácter rebelde y a ganar en responsabilidad poniendo a su cargo a una aprendiz tan díscola como él. El experimento arranca un poco a trompicones, el futuro Darth Vader y su pupila se tiran pullas y discuten, pero con el tiempo ambos crecen como personajes.
A medida que la serie se fue haciendo más adulta, y llegó a hacerse muy adulta en sus últimas temporadas, Ahsoka madura y acaba configurándose como una heroína compleja, que ha aprendido de la victorias, pero también de las derrotas, que ha crecido en medio de una guerra y que se ha enfrentado a un sinfín de desafíos que acabarán por llevarla a tomar la decisión de abandonar la orden Jedi antes de su caída a manos del emperador Palpatine.
Su evolución continúa en la serie 'Rebels', el proyecto que dirigió Filloni tras la cancelación de 'The Clone Wars' cuando Disney compró Lucasfilm. Los nuevos dueños no querían seguir con una serie que se emitía en 'Cartoon Network', un canal que no era de su propiedad, y querían un producto más infantil, más para niños, ese público que los ejecutivos creen que es el único al que le gusta Star Wars.
La cancelación de la serie fue un duro golpe. Disney despidió a la mayoría del equipo de producción. Pero Filloni logró que le pusieran el frente de un nuevo proyecto en el que trató de seguir el mismo camino. Tuvo que volver a empezar con un producto muy infantil en el que poco a poco, temporada a temporada, se iban introduciendo conceptos y tramas más adultas. Y Ahsoka también tuvo un papel que desempeñar en aquella historia que cuenta los orígenes de la Rebelión y de la Alianza Rebelde y que acaba, más o menos, donde empieza la película 'Rougue One'.
En este caso, la antigua padawan ejerce de espía para los rebeldes, los años han pasado, es adulta, es más sabia e incluso llega a enfrentarse a Darth Vader en un duelo de sables de luz en el que descubre que tras las máscara está el que fuera su antiguo maestro, Anakin Skywalker.
Su última aparición en la pequeña pantalla es una secuela de una precuela. Lo normal si hablamos de Star Wars. Aquí las cosas no se cuentan por orden. El año pasado se estrenó la última temporada de 'The Clone Wars'. Disney apostó por cerrar lo que antes había cercenado para darle una conclusión digna.
En esa decisión también tuvo algo que ver Filloni, que se encargo de mantener la llama de 'The Clone Wars' encendida con pequeños proyectos en forma de cómics, novelas y otros productos relacionados. El arco final de la serie es, sin ninguna dudad, el mejor de estos últimos capítulos y en ellos Ahsoka es la absoluta protagonista.
El final de 'The Clone Wars', que transcurre de forma paralela a los acontecimientos que suceden en el episodio III de la saga, es uno de los momentos más emocionantes y emotivos de toda la producción audiovisual de Star Wars. Lo es porque lo vivimos con Ahsoka, porque la vemos luchar en Mandalore, enfrentarse a Darth Maul, afrontar la orden 66, y sobrevivir. Pero nada de esto importaría si no fuera por el bagaje que tiene detrás y por los años que muchos fans la hemos visto vivir aventuras y crecer en su diseño animado en 3D.
La espera ha llegado a su fin. El mandaloriano ya tiene su dirección. Queda por ver qué hará la togruta (así se llama la especie de Ahsoka) con el pequeño 'baby Yoda', y que papel jugará Moff Gideon, el malo de la historia interpretado por Giancarlo Esposito, en todo esto.
La serie ya nos ha dejado claro en el último episodio emitido que Filloni y Favreau no están dejando ningún cabo sin atar. Que esta historia parece estar perfectamente encajada con todo el canon de Star Wars, y que `The Mandalorian' ha venido a conectar, con su propio estilo, todos los puntos oscuros que las últimas películas no han podido o no han sabido explicar: la Primera Orden, el líder Snooke, la `resurrección del emperador'... Y en medio de todo esto también está Ashoka. "This is the way".