Schweppes 'diseña' los gin tonics de 'moda' la Madrid Fashion Week

Líneas rectas, colores neutros y corte diplomático, eso sí, a la manera actual. Si te va el clasicismo atemporal y eres fan de la última colección de rayas XXL de Ángel Schlesser el tuyo es el gin tonic clásico elaborado con Tónica Schweppes Original, un mixer que mantiene la fórmula original del que fuera el primer refresco de la historia añadiendo un plus de lima en su composición y servicio.

Para los amantes de la moda más trasgresora, seguidores del trash y las trasparencias más arriesgadas y asiduos de los complementos extravagantes y formas futuristas, el suyo es el gin tonic de Tónica Schweppes de Pimienta Rosa que se sirve, aquí, con una brocheta de dado de caviar Riofrío y un toque del extravagante cítrico mano de buda. Un gin tonic haute couture, rebelde y un punto picante, que combina a la perfección con los tocados presentados por Maya Hansen en Madrid Fashion Week.

La Tónica de Azahar y Lavanda de Schweppes, ideada para dar vida a un G&T delicado, perfumado y floral, se viste en Cibeles con twists de lima, pomelo rosa y limón y una pipeta de zumo de yuzu, en un vaso perfecto para poner el broche de oro a un desfile de Sita Murt. Sin duda, la copa más naîf para los fans del encaje, el bordado, los estampados florales y el blanco virginal.

Cuero, telas salvajes, geometrías y animal print. El universo selvático imaginado el pasado año por María Escoté encuentra su alter ego etílico en un exótico G&T con las esencias indias y africanas que aporta la Schweppes de Ginger y Cardamomo y los toppings elegidos para la ocasión: brocheta de chile rojo fresco, jengibre y cidra.

En definitiva, ingredientes rompedores y diferentes que ponen la nota de color a unas Original Premium Mixers, diseñadas para marcar la tendencia en mixología la próxima temporada.

Los cuatro combinados Premium de Schweppes se servirán entre desfile y desfile en el Kissing Room, punto de encuentro de diseñadores, modelos y celebrities de la Madrid Fashion Week, y estarán disponibles para el disfrute de todo el público madrileño en Bristolbar (Almirante, 20) durante los próximos tres meses en formato prêt-à-porter.