Madonna vuelve a sorprender al mundo con un topless a sus 56 años, mostrándose en una sesión fotográfica para la revista Interview sin complejos, en la que además sale en otra serie de fotografías vestida con lencería provocativa. Las imágenes, realizadas por el fotógrafo Mert Alas, muestran la cara más sensual de la cantante que las ha compartido en su Instagram, aunque debido a las normativas de la red social ha tenido que censurarlas. En la entrevista que la artista pop ha concedido a esta publicación ha asegurado que lo más difícil de su trabajo es relajarse.
La artista estadounidense ha asegurado también que en estos momentos todos los artistas que podrían inspirar a sus hijos están muertos, pero que si tuviera que elegir a alguien sería al británico Bansky y al artista callejero francés JR, de quien ya muestra cosas a sus hijos. Asegura que el trabajo duro y constante es esencial para que su trabajo parezca más sencillo de lo que realmente es y que el público no se de cuenta del duro trabajo que hay detrás de todo.
Rodearse de gente creativa e inteligente es un aspecto importantísimo para la cantante. "Me sentía atraída por gente creativa. Tú no quieres ser la persona más inteligente de la habitación; quieres ser la más estúpida. Tú quieres estar rodeado de una serie de personas reflexivas que van a decir algo que te haga pensar a ti", asegura la cantante.