Florian Schneider-Esleben, fundador de la mítica banda Kraftwerk y pionero de música electrónica, ha muerto a los 73 años, en Berlín. El músico alemán falleció a consecuencia de un cáncer, según informó fuentes de la compañía discográfica Sony.
Schneider-Esleben,(1947-2020) nació en Düsseldorf (oeste de Alemania), donde creó su banda junto con Ralf Hütter en 1968. Debutaron en vivo dos años más tarde y como trío con Charly Weiss. Entonces lanzaron su propio sello discográfico, Kling Klang, en su ciudad natal, que se convirtió en plataforma para grupos como el suyo.
Kraftwerk creó un nuevo género cuando buscaba componer una música típicamente alemana al mezclar su lengua materna con el sonido de las grandes ciudades para competir con el pop anglosajón, que había aterrizado en el país tras la Segunda Guerra Mundial.
Su música, que combina bajos obsesivos, sintetizadores y cajas de ritmos digitales, logró la simpatía del público y de otros artistas, desde David Bowie hasta Daft Punk. La distorsión de voces con el "vocoder" (codificador o sintetizador de voz), marca registrada del grupo, se transformó en un clásico.
En sus canciones intercalaba palabras en alemán, español, ruso, polaco y japonés también los convirtieron en precursores. Desde la década de 1970 se centraron en la omnipresencia de las máquinas y el rol creciente de la tecnología en la vida cotidiana.
Grupo vanguardista y actor muy influyente en el arte contemporáneo, Kraftwerk encadenaría éxitos mundiales con álbumes como Autobahn (1974), Radio-Aktivität (1975), Trans Europa Express (1977), Die Mensch-Maschine (1978) y Tour De France (2003).
Schneider abandonó el grupo a fines de 2008. En 2014, la banda ganó el exclusivo premio Grammy a la carrera artística.