Gene Hackman, encontrado muerto a los 95 años junto a su esposa en su casa de Santa Fe (Nuevo México) en circunstancias por esclarecer, llevaba más de 20 años alejado de la interpretación y de la escena pública en general. El actor, uno de los mejores del cine estadounidense de finales del siglo XX, siempre mantuvo en un segundo plano su vida privada, de la que jamás hablaba ante los medios, ganándose una reputación de tipo con malas pulgas y antipático.
Eugene Allen Hackman nació en San Bernardino, California, en 1931. Como sus padres se separaron cuando él era aún pequeño, tuvo que vivir con una de sus abuelas. A los 16 años se unió a la Marina estadounidense y tras licenciarse trabajó en diferentes oficios, e incluso estudió periodismo. De hecho, no descubrió su vocación como actor hasta después de los 30 años, bastante tarde para lo que suele ser habitual.
Su primer gran éxito llegó en 1967 con la película 'Bonnie and Clyde', en su papel de Buck Barrow, acompañante de la legendaria pareja que formaban Faye Daneway y Warren Beatty, de quien se haría muy amigo. Cuatro años después ganaba el Oscar como actor principal por 'French Connection'. A partir de ahí encadenaría más éxitos y prestigio como intérprete de carácter de la mano de cintas como 'La conversación', 'La noche se mueve', 'Superman', 'Arde Mississippi' o 'Sin perdón', por la que ganaría su segundo Oscar, en esa ocasión como actor de reparto.
Hackman fue uno de esos raros intérpretes que solo se dejan conocer en la pantalla. Apenas se sabía nada de él fuera de ella, más allá de que llegó a publicar varias novelas y que entre sus aficiones estaban pintar y pilotar aviones y coches de carreras. Esa bruma sobre su figura se extiende también a su vida sentimental.
Su primera esposa fue Faye Maltese, con la que convivió entre 1956 y 1986, año en el que se divorciaron. Fruto de su unión son sus tres hijos, Christopher Allen, Elizabeth Jean y Leslie Anne, que también se han mantenido al margen de los focos. "Le hubiera gustado estar más cerca de sus hijos, pero ahora es cercano a ellos y a sus nietos", dijo una fuente cercana al actor a Closer Weekly.
“Desde el principio perdí el contacto con mi hijo en cuanto a consejos. Tal vez tuvo que ver con estar tanto tiempo fuera de casa, haciendo películas en exteriores cuando él estaba en una edad en la que necesitaba apoyo y orientación. Fue muy duro para mí estar fuera durante tres meses y luego volver a casa y empezar a darle órdenes”, recordaba el actor en una entrevista con la revista GQ de 2011.
Hackman se volvió a casar 1991 con Betsy Arakawa, treinta y dos años menor y pianista de profesión, que ha aparecido muerta junto al actor. Desde que se retiró de la actuación en 2004, Hackman llevaba una vida tranquila en su rancho junto a su mujer y dedicada únicamente a ahondar en su faceta literaria. Las ocasionales fotos que durante estos últimos años han aparecido en la prensa llamaban la atención por el notable declive físico del actor que, sin embargo, nunca perdió la mirada hosca y desafiante que siempre le caracterizó.