Hay canciones que son transparentes. Se explican perfectamente a sí mismas. Es el caso de 'Devuélveme a mi chica', el gran clásico de los Hombres G, su canción más emblemática. Más conocida por el pegajoso 'Sufre, mamón' de su estribillo, lo cierto es la canción nació del deseo de su autor, David Summers, de molestar y hacer sufrir al tipo que se había "llevado" a su chica de aquella época. Es exactamente lo que parece: una canción de venganza adolescente.

Hay que remontarse a los inicios de los años 80, cuando Summers, su amigo de infancia Javi Molina, Dani Mezquita y Rafa Gutiérrez formaron Hombres G. Su primer single, publicado en 1983, era una canción llamada 'Milagro en el Congo'. En la cara B llevaba otro tema que Summers había compuesto poco antes de entrar a grabar, sin muchas pretensiones. Era 'Venezia', y fue con la que explotaría todo un fenómeno sin antecedentes en el pop español.

Pero años antes de la fama, Summers había tenido una novia, Inmaculada, 'Macu', su primer gran amor. El problema es que "ella era una niña muy pija y yo en aquella época era muy punki", rememoró el cantante en una entrevista televisiva. "Hasta que me dejó por un pijo, un niño bien, que iba con un Ford Fiesta blanco y un jersey amarillo". Tal cual.

Antes de dar uno de sus primeros conciertos en la sala Rock-Ola, Summers se enteró de que ella iba a ir con su novio, así que fue corriendo a casa y compuso la canción para tocarla en sus narices. "En aquella época esas eran mis motivaciones para hacer las canciones", ha admitido el cantante y bajista. "La escribí exclusivamente para ese día, lo único que quería era mandar a la mierda al tío que me había robado a la novia", asegura en el libro 'Nunca hemos sido los guapos del barrio', de Javier León Herrera.

"Me acuerdo perfectamente de estar cantando la canción y verles a ellos entre el público. Él me miraba con cara de mala hostia, porque, claro, él no quería estar ahí", rememora el líder de los Hombres G. Mientras seguían acumulando conciertos en pequeños garitos, empezaron a notar que la gente ya pedía "la de los pica pica". Se dieron cuenta de que esa canción en concreto tenía algo especial, aunque entonces no podían sospechar hasta dónde les llevaría.

En la película parcialmente autobiográfica 'Sufre Mamón' (1987) era Marta Madruga, ya por entonces pareja en la vida real de Summers, quien interpretaba a la novia del cantante, la que "se fue con un niño pijo" encendiendo los odios de media España adolescente. Hombres G incluso traspasaron las fronteras patrias y se hicieron especialmente populares en Latinoamérica con 'Devuélveme a mi chica'. También en México, donde la palabra 'mamón' se consideraba una grosería fuerte. “Esa canción nos ha abierto puertas de países enteros. En los 80 íbamos con ella a América y ardía la canción. Es la canción que nos dio todo”, reconoce su autor.