Cuando tenía 16 años, Cameron Diaz dio sus primeros pasos en el modelaje, ámbito que le llevó a viajar alrededor del globo. Sin embargo, fue durante sus idas y venidas por el mundo cuando descubrió su pasión por la industria cinematográfica, la cual en un primer momento no le interesaba según ella misma ha desvelado en diferentes entrevistas a lo largo del tiempo.
Tras tomar su decisión, a los 21 años obtuvo la gran oportunidad de su vida tras convertirse en la protagonista de ‘La máscara’, película de renombre en la que compartió set de grabación con Jim Carrey y que supuso su salto a la fama. Desde entonces, arrastra a sus espaldas relevantes proyectos como ‘The Holiday’, ‘Algo pasa con Mary’ o ‘Los Ángeles de Charlie’.
Cameron es una de las novias de América que, a pesar del paso del tiempo y de haberse mantenido alejada de la industria durante una década, no pasa de moda. Ahora, además, a sus 52 años la actriz está a punto de reencontrarse con Hollywood. Será en ‘De vuelta a la acción’, film en el que compartirá protagonismo con Jamie Foxx y en el que interpretarán a un matrimonio exmiembro de la CIA que, tras optar por dedicar su tiempo a su familia, vuelven al mundo del espionaje.
Precisamente, al igual que su personaje, Diaz habría preferido mantenerse alejada del cine durante diez años para centrarse en el cuidado de sus hijos, así como en el suyo propio. La decisión llegó en el año 2015, cuando afirmó querer retirarse.
Tras hacer pública su decisión de centrarse en su vida personal, ese mismo año ponía el broche de oro a su relación con Benji Madden con su paso por el altar: “No podemos estar más felices de comenzar esta aventura juntos y rodeados de nuestras familias y amigos más cercanos”, expresaron en People los que se casaron en enero en una boda celebrada en el jardín de su casa en Los Ángeles junto a sus familiares y allegados.
Junto a su marido, cantante, productor discográfico y multinstrumentista, ha tenido dos hijos por gestación subrogada: la primera, Radixx, llegó al mundo en 2019 y en 2024 lo hacía su hijo Cardinal Madden. Además, solo un año después del nacimiento de su primogénita, la intérprete creaba junto a su amiga Katherine Power una empresa, ‘Avaline’, que ofrece vinos veganos y orgánicos.