Alejandro Sanz a punto de un jet privado o unos jovencísimos Estopa: nuestra memoria musical, en fotos
El fotógrafo Daniel Sánchez Alonso inaugura en Guadalajara la exposición itinerante 'Retrato editorial en tiempos de sms'
En este viaje nostálgico, ha escogido de su archivo instantáneas de primeras veces o momentos icónicos en la vida de muchos famosos
Entre ellas, Estopa, Antonio López o el Maestro Reverendo, ya fallecido, que quiso retratarse en bata en su casa de Ópera
¿Qué le pasaría por la cabeza a aquel Alejandro Sanz de 33 años que fumaba sonriente en el hangar del aeropuerto de Torrejón de Ardoz, a punto de tomar el jet privado que le llevaría a Valencia? En 2001, en plena muda de chico de barrio de Moratalaz con deje andaluz y apasionado por el heavy metal a estrella de la canción que superaría los 25 millones de discos vendidos, el fotógrafo Daniel Sánchez Alonso atrapó ese día su gesto en un leve respiro cuando se pateaba España entera. La instantánea contiene alegría, la agitación de la juventud y, a la vez, la calma de un sueño que empieza a cumplirse. El artista ha escogido ese retrato como parte de una exposición itinerante que inaugura este mes en Guadalajara y recorrerá diferentes ciudades españolas.
La muestra, que lleva por título 'Retrato editorial en tiempos de sms', la componen 47 retratos que Sánchez ha rescatado de su vasto archivo. 47 instantáneas en blanco y negro, algunas inéditas y otras publicadas en diferentes medios de comunicación, que van desde mediados de 1993 hasta la actualidad, según nos explica a punto de recibir a sus primeros visitantes.
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La fuerza del blanco y negro
Con 'Retrato editorial en tiempos de sms', el autor emprende un viaje nostálgico por nuestra historia cultural y política reciente. Las obras están realizadas en momentos únicos que cuentan una historia y comunican emociones y sensaciones. Instantáneas en las que el color que su cámara captó se transforma en un blanco y negro que hace ver la instantánea de una forma nueva y aprehendiendo en los contrastes cada matiz de la fotografía. "El blanco y negro elimina cualquier forma de distracción y el retrato gana fuerza visual", explica.
El blanco y negro permite una mayor conexión con nuestros recuerdos. Ahí están, por ejemplo, las miradas de los hermanos David y José Manuel Muñoz, jovencísimos, poco después de arrancar su trayectoria como Estopa. El fotógrafo se fue de gira con ellos por Extremadura en un reportaje para la revista Rolling Stone. "Era la época en la que David y José publicaron 'La raja de tu falda', la rumba que impulsó su fama". Ese retrato lo realizó con su Hasselblad de segunda mano. "Es el reflejo de una época sin rastro de imágenes de móviles. De hecho, la exposición nos invita a una reflexión sobre cómo se vivía el periodismo y la fotografía en unos tiempos de gran transformación".
Son fotografías con alma y al autor le resulta complicado escoger una que ocupe un lugar especial. Muchas de ellas atestiguan esas primeras veces de un personaje, un momento decisivo en su carrera. Cada una atesora una narrativa sincera que al cabo de los años se convierten en un espejo en el que mirarse los propios retratados y, sin duda, un valioso testimonio periodístico, cultura e incluso político. Ahí están políticos como Esperanza Aguirre, María Teresa Fernández de la Vega (con la que compartió viajes en Falcon), Teresa Rodríguez, María Dolores de Cospedal o Soraya Sáenz de Santamaría, entre otros.
Mario Vaquerizo y su admirado David Bowie
Vemos a un joven Mario Vaquerizo que posaba en 2010 para la revista Psychologies y confesaba que querer parecerse a David Bowie era apuntar demasiado alto. Boris Izaguirre, Pablo Carbonell, Pedro Reyes, Corbacho, Marta Etura, Pau Donés, Mario Casas, Maribel Verdú o Silvia Marsó son otros de los artistas retratados por Sánchez impregnándoles con su propio sentido del humor, ironía y personalidad.
Si tiene que hablar de gratitud a la vida por ejercer una profesión que le apasiona, menciona, por ejemplo, al pintor y escultor Antonio López. Su retrato, junto a una de sus esculturas, cuelga impresionante y solemne en una de las paredes.
Un lugar de honor para el humorista Lamine Thior
Y si deja que aflore la emoción, el nombre que aparece de inmediato es el humorista y activista Lamine Thior, que trabajó como actor en 'La ley del mar', junto a Luis Tosar. "Lo conocí en 2007, realizando un reportaje para El País Semanal sobre los inmigrantes de segunda generación. Ya asentado en Algeciras con su familia, su madre decidió parirlo en Senegal y luego regresar. La fotografía que aparece en la muestra la hicimos en la sierra de Madrid y era la primera vez que Lamine veía la nieve".
A juzgar por las palabras que le ha dedicado el humorista, el agradecimiento es mutuo: "Daniel ha sido el testigo fotográfico de todo mi crecimiento, no sólo como artista, sino como persona. Esa capacidad que posee para sacar la esencia única de cada figura que se coloca delante de su cámara es increíble. La persona que más veces me ha fotografiado en mi vida, el fotógrafo con el que más cómodo me he sentido nunca y sobre todo, el artista, porque es puro arte lo que hace, más auténtico y genuino que conocido. Dansan es a la fotografía lo que el oxígeno para los seres humanos, esencial e indispensable".
Viajando en el tiempo, nos encontramos al grupo R.E.M, que presentaba en Madrid su duodécimo álbum, 'Reveal', y a los que Sánchez retrató en veinticinco segundos fuera de la presentación oficial. "La perspectiva del tiempo me permite apreciar en ellos rasgos o elementos que, en el momento, debido al ritmo vertiginoso que exige este trabajo, pasaron más desapercibidos", nos cuenta a punto de abrir al público su muestra.
En estas tres décadas de trabajos, Sánchez ha desarrollado un estilo personalísimo de trabajo que ahora identifica en cada una de las obras que componen esta colección y el resto de su ingente archivo. "Rescatar este archivo está suponiendo una sorpresa y un ejercicio de memoria histórica", indica. Esa memoria es también la nuestra. En la exposición aparece, por ejemplo, el popular actor británico Mr. Bean. Sin necesidad de posar -es el único del grupo de los 47 que no lo hizo-, su retrato transmite la vis cómica de este estrafalario personaje que tanto nos hizo reír durante dos décadas. Todo un maestro de la comedia.
Era una época en la que Tony Leblanc triunfaba de la mano de Santiago Segura. El veterano actor recogía el Goya al Mejor Actor de Reparto en la 13.ª edición de los galardones de la Academia de Cine, por su interpretación en la película 'Torrente, el brazo tonto de la ley'. Entrañable es también la fotografía del Maestro Reverendo. El fallecido músico y compositor madrileño Ángel Muñoz Alonso fue compañero de El Gran Wyoming (también presente en esta exposición) durante más de 20 años, y arreglista, compositor y músico de estudio. Su retrato íntimo, en bata, como a él le gustaba trabajar, en su casa de Ópera, en Madrid, es parte de la historia musical de este país.
Reivindicar la fotografía de autor
La muestra sirve, de paso, para conocer algo más de este fotógrafo independiente que está detrás de muchas de las imágenes que han ido pasando por nuestra retina a través de los múltiples dominicales y revistas en los que ha trabajado: El País Semanal, Rolling Stone, Vanity Fair, Elle, The Hedge Fund Journal, Abacapress o XL Semanal.
Nació en Madrid en 1972 y desde muy joven se aficionó a la fotografía. Aprendió de forma autodidacta, casi intuitivamente. Actualmente, dirige y produce un documental sobre Conservación de Archivos Fotográficos, además de continuar con sus proyectos de autor y de fotoperiodismo social. Su trabajo en retrato y documental lo ha compaginado siempre con su obra personal, que ha expuesto de manera individual y colectiva desde 1996 hasta la fecha.
En la exposición, comisariada por Benito Román (Premio Piedad Isla 2024), Sánchez quiere desprenderse de cualquier ego para quedarse con la idea de que lo importante es compartir: "Si yo me relaciono y disfruto recordando estas fotografías, lo bueno es hablar de esas historias y que todos disfrutemos de la cultura".