ARCO celebra su 43ª edición. Lo hace huyendo de polémicas, festejando la cultura iberoamericana, reivindicando a artistas femeninas y dando el lugar que se merece a lo 'queer'. Esto último, de la mano de 'Manuel', el protagonista absoluto de una feria que los reyes de España inauguran este 6 de marzo y que se prolongará hasta el domingo 10.
Esta escultura homoerótica que Rodrigo, su autor, terminó en 1986 se expuso en la segunda edición de ARCO. En aquel momento, en plena Transición, su exhibición suscitó tal escándalo que ha permanecido escondida hasta hoy, momento en el que el concepto de censura ha variado pero persiste. Sin embargo, a pesar de la potente narrativa que hay detrás de 'Manuel', hay otra obra ubicada en el mismo pabellón 7 de IFEMA que está dispuesta a hacerle la competencia en cuanto a repercusión.
Hablamos del Joan Miró que preside el stand 7B22. En él, la galería Leandro Navarro ha presentado un cuadro que el barcelonés pintó en el verano de 1936 y que forma parte de una colección de 27 piezas que compuso al arrancar la Guerra Civil española. Antes de ARCO, 'Peinture' ha pasado por la Galerie Pierre de París, la Pierre Matisse Gallery o la Paul Kantor Gallery de Nueva York y el San Francisco Museum of Art de San Francisco. Los materiales con los que se confeccionó son óleo, caseína, betún y arena. Y su precio de salida, a la espera de una puja mayor, es de 3,3 millones de euros.
Por detrás de él está Picasso, otro plato fuerte de esta edición. 2,5 millones de euros vale un cuadro firmado por él y que cuelga de las paredes del stand de la galería Guillermo de Osma. También una estatua de Chillida, en la galería Mayoral, tasada en 1,2, o un Sigmun Polke en Vera Munre, que se vende por 1,7.
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