El próximo fin de semana se cumple un año de la muerte del famoso cantante Aaron Carter, que falleció a los 34 años en un accidente doméstico. El informe forense determinó que Carter se ahogó en la bañera de su casa en Lancaster, California, después de consumir "accidentalmente" un gas y tranquilizantes.
Su prometida Melanie Martin, en representación de su hijo Princeton Lyric Carter, que nació en noviembre de 2021, ha presentado una demanda contra los médicos y enfermeros que trataron a su padre, a los que acusa de negligencia médica y culpabiliza de su muerte.
Según los documentos legales que ha obtenido el portal TMZ, la demanda sostiene que los médicos recetaron y vendieron medicamentos de forma indebida a su padre, lo que afectó a su salud mental y a su capacidad de decisión. Afirma que no había ninguna necesidad médica para que Aaron tuviera acceso a medicamentos como hidrocodona, oxicodona y alprazolam.
La demanda alega que estos medicamentos tuvieron un efecto negativo significativo en la salud de Aaron, contribuyendo a su muerte, especialmente teniendo en cuenta su historial de salud mental y condiciones psiquiátricas previas.
El documento legal pide una indemnización por daños y perjuicios, aunque no se ha especificado la cantidad. Entre los demandados se encuentra Walgreens, una de las mayores cadenas de farmacias de Estados Unidos.
A pesar de que la causa oficial de la muerte de Aaron fue atribuida a los efectos del difluoroetano, un gas inflamable, y al alprazolam, tanto la madre de Aaron, Jane Carter, como su prometida han cuestionado la veracidad de este informe forense. Jane ha manifestado públicamente su creencia de que su hijo fue asesinado, aunque hasta ahora no hay evidencias que apoyen esta afirmación.
Melanie Martin se suma a la lista de familiares que sospechan que la muerte de Aaron implica circunstancias más complejas de lo que sugiere el informe oficial.