La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, ha lucido el pañuelo que una guía de la Alhambra le regaló durante la visita que los mandatarios europeos hicieron al monumento; la jefa del Ejecutivo comunitario trasladó a la trabajadora lo bello que le parecía este complemento con la imagen del Jarrón de las Gacelas y ésta al finalizar el acto se lo regaló, según han detallado desde el monumento nazarí.

La cumbre de la Comunidad Política Europea (CPE) culminó anoche con una foto de familia en el emblemático Patio de los Leones de la Alhambra, pero los mandatarios también tuvieron ocasión de recorrer previamente algunos de los enclaves más emblemáticos de este monumento, Patrimonio de la Humanidad.

Fueron recibidos por el personal del Patronato de la Alhambra, con su director a la cabeza, y por varios guías. Todos iban ataviados con un detalle alhambresco, ellos en la corbata y ellas con un pañuelo de fondo azul con la imagen del Jarrón de las Gacelas, que está expuesto en el Museo de la Alhambra.

Durante las explicaciones acerca del monumento Ursula von der Leyen se fijó en el pañuelo que llevaba una de las guías y alabó la belleza de este complemento. Terminado el acto, la guía decidió regalárselo y la jefa del Ejecutivo comunitario ha tenido el gesto de acudir este viernes con el pañuelo a la cumbre informal de jefes de Estado y de Gobierno de la Unión Europea que se celebra en el Palacio de Congresos de Granada.

Muchos de los mandatarios y sus acompañantes mostraron anoche gestos de asombro y admiración por la belleza del patio de los Leones y se les pudo ver haciendo preguntas e interesándose por algunos aspectos de este encalve así como de la vecina Torre de Comares. En todo momento, había presente personal del Patronato de la Alhambra para resolver cualquier duda.

Algunos, como el Alto Representante de la UE para Política Exterior, Josep Borrell, el primer ministro luxemburgués, Xabier Bettel, el presidente rumano, Klaus Iohannis, o la esposa del primer ministro de Eslovaquia no dudaron en sacar sus teléfonos móviles y tomar algunas fotos y vídeos.

Se formaron algunos corrillos animados entre los asistentes, a la espera de que llegaran el resto de invitados. Los últimos en llegar a la Alhambra fueron el canciller alemán, Olaf Scholz, y el presidente francés, Emmanuel Macron, que mientras llegaban los primeros invitados aún estaba en el Palacio de Congresos dando una rueda de prensa.