María Teresa Campos y sus secretos detrás de las cámaras: "un terremoto, perfeccionista, incansable y con genio"
Recordamos cómo era María Teresa Campos, fallecida a los 82 años, detrás de las cámaras con las que más la conocían
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Isabel Jiménez lo tiene claro al hablar de María Teresa Campos, fallecida a los 82 años de edad, el mismo día en el que lo hizo hace 17 años su madre. "Ha sido para todos la gran maestra de la televisión. De alguna manera u otra, nos ha enseñado algo a todos nosotros y siempre cuando coincidías con ella en los pasillos o en un plató era muy generosa".
David Cantero también tiene un gran recuerdo de una de las grandes reinas de la televisión de toda su historia. "Los que trabajaron con ella durante años, siempre cuentan esa manera tan particular que tenía de hacer las cosas y de preparar sus programas. Y cómo le gustaba controlarlo todo, desde el contenido hasta el vestuario, en el que no faltaban sus míticos tacones". Sí, porque ¿cómo era María Teresa Campos detrás de las cámaras?
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Lo primero que veía cualquiera que trabajaba con María Teresa Campos es que era la primera en llegar y la última en marcharse. Alicia Blanco, peluquera, sin poder reprimir la emoción, reconoce que "era un terremoto, con una capacidad de trabajo enorme".
Siempre a su lado, incondicional, su chófer. A Gustavo Guillermo la emoción solo le dejaba decir esto. "Se ha ido lmejor, solo quiero decir eso".
Si hay una cualidad que destaca casi todo el mundo es su rapidez mental para enlazar temas, organizar coberturas o estructurar el guion de un programa. En fin, su inteligencia. Su estilista Pepa Carmona recuerda que María Teresa Campos tenía carácter. Nadie lo niega. Fuerte, además. Pero también se rodeaba de gente con mucha personalidad. Y si reprendía era en privado. En público siempre defendía a su equipo.
Luisa Iglesias, jefa de peluquería cree que tenía su genio pero era un ser maravilloso. Se ganó a pulso esa especie de título que este país da a las mujeres ante las que se quita el sombrero, y que consiste en colocar el artículo delante del apellido: se nos ha ido la Campos, una grande.