El bailaor Rafael Amargo iba a ser juzgado a partir de este miércoles por la supuesta venta de drogas en su piso del barrio madrileño de Malasaña. La Audiencia Provincial de Madrid esperaba la cita ante un supuesto delito contra la salud pública que podría llevarlo a cumplir 9 años de prisión, según la petición de la Fiscalía, pero el juicio ha quedado suspendido por un cambio de abogados por parte de otro de los acusados, –Juan Eduardo de los Santos, productor del bailaor granadino–, quien se ha referido a una ‘pérdida de confianza’ en su letrado de oficio.
Ante esta situación, y tras ser dirimido por la Sala, le han dado un plazo de 24 horas para designar un nuevo abogado, siendo ya el segundo al que renuncia.
En sus primeras palabras tras esta decisión, al salir del juzgado, Rafael Amargo ha asegurado que "no hay nada" y que lo único que hay es, de hecho "un error y un daño muy grande". Recriminando a los periodistas y pidiéndoles "tener un poco de humanidad", les ha pedido defender la verdad. "Ninguno de vosotros ha dicho todavía la verdad", ha señalado, ante lo que inmediatamente le han preguntado: ¿Y cuál es la verdad?. A ello ha respondido tajantemente: "Que en mi casa no había nada, que se están tapando y ocultando otro tipo de cosas y que, además, se están cargando una familia, sin sentido, sin conocimiento".
Entre tanto, el juez de Instrucción número 27 de Madrid investiga al bailaor por un delito de tráfico de drogas y atentado a la autoridad, a raíz de una denuncia interpuesta el pasado julio por sus vecinos en relación a la presunta venta de droga en su piso de la calle Espíritu Santo de la capital.
Ante el juicio que tiene por delante, el bailarín aseguraba en su llegada a los juzgados que está tranquilo y que confía en la justicia. "No voy a ir a prisión", ha asegurado, convencido.
El de Valderrubio ha llegado sobre las 09:45 horas a la Audiencia Provincial de Madrid en taxi y acompañado por su abogado. Ataviado con traje y un pañuelo al cuello ha hecho unas breves declaraciones a los numerosos periodistas que le esperaban, a los que ha contestado que está tranquilo. Su letrado, Jaime Caballero, ha confirmado que no van a llegar a ningún acuerdo con la Fiscalía de cara al juicio. "No, nunca", ha aseverado.
Antes del cambio de abogados de Juan Eduardo de los Santos, que ha obligado a la suspensión de la vista, la Audiencia de Madrid tenía previsto juzgar desde este miércoles a Rafael Amargo, al que fue su productor y a un socio por integrar un grupo que traficaba con droga, fundamentalmente metanfetamina, que vendían desde el piso del artista, unos supuestos hechos por los que la Fiscalía pide para el artista nueve años de cárcel.
El juicio estaba fechado para los días 7, 8, 9 y 12 de junio en la Sección 30 de la audiencia madrileña contra él, de los Santos y otro socio del artista llamado Miguel Ángel Batista León. Estaba previsto que declarasen y que testificasen además tres policías, mientras que el día 8 lo harían un total de 33 testigos -la mayoría agentes- y varios peritos, han precisado fuentes jurídicas.
El magistrado que llevó la instrucción del caso, Juan Ramón Reig, propuso inicialmente juzgar a los tres acusados y a la mujer de Amargo, Lucia Bonginiano, por un posible delito contra la salud pública y otro de pertenencia a grupo criminal, pero, al no acusar la Fiscalía a la mujer, el proceso no siguió contra ella. El juez apreció que el bailarín era el cabecilla de un grupo que traficaba con droga, fundamentalmente metanfetamina, que vendían desde el piso que compartía con su mujer, utilizando "mulas" que llevaban la droga a los compradores.
El artista fue detenido el pasado marzo en Alicante, quedando en libertad provisional, aunque la jueza le impuso la obligación de comparecer quincenalmente en el juzgado y la prohibición de salida del país. Este arresto se suma a la detención del caso que se juzga ahora en la Audiencia de Madrid.
Amargo fue también detenido el 1 de diciembre de 2020 junto a su pareja y otras dos personas en el marco de la 'operación Codax', cuyo nombre significa cuervo en latín y se apoda así por una imagen de Amargo de su Instagram en la que aparece con unas alas de esta especie de ave.
Los arrestados quedaron en libertad con medidas cautelares después de declarar, aunque con medidas cautelares. El fiscal solicita la misma pena para Juan Eduardo S.B., asistente de producción de Amargo, al actuar supuestamente de forma "conjunta" con el otro acusado en la compra y posterior distribución de drogas.
El fiscal relata que, durante los meses de abril y diciembre de 2020, ambos "se venían dedicando de manera concertada y persistente a la distribución de sustancias estupefacientes, entre otras metanfetamina, a terceras personas a cambio de dinero".
Los dos acusados, Rafael Amargo y Juan Eduardo S.B adquirían la droga de manera "conjunta" a los distintos suministradores, para posteriormente repartirla entre ambos y venderla a terceras personas, según el relato de la Fiscalía.
El bailarín supuestamente vendía las sustancias estupefacientes a las personas que acudían a su domicilio de Madrid y en otras "hacía llegar la sustancia al lugar donde el cliente indicaba para lo cual se valía de otro de sus hombres de confianza, el también acusado Manuel Ángel B.L., otro de los socios de Amargo, a sabiendas de lo que portaba, después de hacer la entrega correspondiente, regresaba al domicilio para entregarle el dinero obtenido con la venta".
La Fiscalía relata que el 27 de abril de 2020, Manuel Ángel para quien pide seis años de prisión, fue sorprendido por la Policía cuando se disponía a entregar a un cliente una bolsita con metanfetamina a cambio de 50 euros; esta sustancia la había recogido minutos antes del domicilio de Amargo, "donde debía regresar para entregar el dinero".
Los dispositivos de vigilancia que se establecieron sobre el piso de Amargo, los agentes de la Policía Nacional pudieron observar "cómo acudían numerosas personas que, tras acceder al mismo y permanecer en el interior escasos minutos, salían nuevamente de manera apresurada, procediendo los agentes a identificar a dos de ellas, interviniendo sustancia estupefaciente que se había adquirido en dicho domicilio, levantándose las correspondientes actas de aprehensión".
Por un auto dictado el 1 de diciembre de 2020 por el Juzgado de Instrucción número 48 de Madrid se autorizó la entrada y registro en los domicilios de los acusados.
En el caso del bailaor, los agentes intervinieron 3 botes conteniendo sustancia Popper (nitritos de alquilo), una bolsita conteniendo sustancia que resultó ser feniletilamina con un peso neto de 0,089 gramos y un frasco conteniendo 6 mililitros de GBL con un valor en el mercado de 314,19 euros en su venta por gramos.
En el caso de Juan Eduardo, los agentes hallaron un bote conteniendo sustancia que resultó ser metanfetamina, con un peso neto de 4,466 gramos y una pureza del 76,4%, con un valor en el mercado de 115,67 euros en su venta por gramos; una bolsita conteniendo sustancia que resultó positivo a ketamina, con un 50,4% de pureza; y MDMA con una pureza del 6,9% con un peso neto total de 0,185 gramos con un valor en el mercado de 18,5 euros en su venta por gramos.