La pandemia trastocó por completo nuestra vida. De repente nos vimos completamente encerrados en casa y luego viviendo una situación completamente nueva al convivir con un virus del que poco conocíamos. Todo esto llevó a cambiar nuestro ocio y, las discotecas y las salas de música fueron parte de los sectores más afectados. De esta manera, algunas ya se reinventaron en plena pandemia, mientras que otras lo siguen haciendo ahora, como la discoteca Holiday que, tras su muerte, ahora resucita.

Ha sido uno de los locales gaditanos más famosos durante más de cuatro décadas, nació en 1977, pero en los próximos meses, la discoteca reabrirá sus puertas como sala de espectáculos y de conciertos, tal y como informa La voz de Cádiz, dando una gran prioridad a la música. “Todo tendrá su espacio sin limitarnos a estilos, sectores o edades concretos”, explican sus promotores al diario mencionado.

De esta manera, en su segunda vida, Holiday no solo será una sala disponible para los clientes, también para acoger diversos eventos de instituciones, empresas o particulares, así como una programación trabajada para atraer a los mejores talentos a la ciudad. En cuanto a sus prioridades está especialmente la celebración de conciertos de formato medio, con el objeto de ampliar la oferta cultural en Cádiz.

No son pocas las discotecas que, a día de hoy, combinan los conciertos de música en directo con la fiesta nocturna. Sin ir más lejos, en Madrid la sala La Riviera es una de las más famosas en cuanto a conciertos, pero también acoge algunas de las mejores fiestas nocturnas de la ciudad. Algo similar ocurre con salas como la Cool o el Ochoymedio Club.

Contar con más de 60 años de vida no es tarea sencilla, y eso lo ha logrado Corral de la Morería, que se inauguró en 1956 en Madrid y, desde entonces, es denominado el mejor tablao flamenco del mundo, así como el más antiguo del planeta. No es de extrañar su fama, por ahí han pasado Pastora Imperio, José Mercé, Paco de Lucía o Isabel Pantoja. Más de 60 años después, sigue siendo un referente en cuanto a espectáculos flamencos, reinventándose con su propio restaurante dirigido por David García, que ha conseguido una Estrella Michelin y dos Soles Repsol.

Otro tablao de la capital con el que no ha podido la pandemia es Cardamomo, el primero en abrir tras el fin de las restricciones provocadas por la covid-19 tras casi un año con la puerta cerrada. A lo largo de tres décadas su escenario ha visto triunfar a Farruquito, Joaquín Cortés, Estrella Morente o Antonio Carmona. Uno de los lugares perfectos para disfrutar del mejor flamenco, con buena compañía y las mejores tapas.