El cantante Dani Martín ha sorprendido a todos sus seguidores al anunciar su retirada de la música por un tiempo: "Hasta luego, hasta siempre, hasta cuando surja de verdad", compartía el artista en sus redes sociales, donde ha recibido una oleada de apoyo.
El cantante ha explicado su retirada en un mensaje que ha acompañado de un vídeo, donde interpreta junto a su banda la canción 'La madre de José', de su último concierto en la madrileña sala La Riviera el pasado 7 de diciembre.
Sin embargo, a las horas ha dado marcha atrás y ha querido explicar este cambio. Según Dani Martín, en el comunicado lanzado no estaba anunciando su retirada definitiva sino una retirada temporal. El cantante se aleja del escenario ya que, según él, esta profesión creativa necesita un poco de espacio y de descanso para volver con más ganas.
"Soy una persona con tendencia a engordar, con ansiedad, con dificultad para concentrarme y ser capaz de aprender a tocar un instrumento musical de manera que yo considere correcta", comienza escribiendo el cantante.
"He aprendido a cantar y no hacerme daño en la garganta en estos últimos tiempos, me tengo que aprender las cosas de memoria, tengo buen oído, me sé todo sobre el pop/rock español, no sé nada de técnica de audio, no sé producir un patrón de batería para una canción", continúa.
"Tuve una banda de éxito. He escrito un montón de canciones que forman parte de la vida de algunas personas. Luego, me separé de mi banda y todo se ha ido convirtiendo en algo muy, muy bonito. Este año la gente decidió comprar entradas para 5 WiZink Center en menos de dos meses; tanto la compra, como la ejecución de los mismos", comparte.
El madrileño también ha aprovechado el mensaje para hablar sobre su salud mental: "A veces estoy delgado y otras hinchado. Emocionalmente no soy una persona muy equilibrada, sufro mucho. Disfruto mucho en el escenario, ahora sin beber alcohol mucho más".
"No soy un gran cantante, tampoco sé si lo hago bien y la verdad que hay algo que me sorprende: que 22 años después siga pasando todo esto con el síndrome del impostor tan grande que tengo; la verdad, me asombra. Jamás pensé que pasara nada de lo que ha sucedido en esta gira: no me imaginaba un staff así, un sonido así, una banda así, un público así y una vida así como la que tengo", confiesa.
El cantante ha dado las gracias por todo a todos sus seguidores y ha asegurado que terminar con un concierto en La Riviera "era necesario para mí, antes de volver a la realidad de ser Daniel, el que habita en su sofá, el que bebe vino, el que juega al fútbol mal, pero le pone el corazón. Tocar tierra".
Por último, ha asegurado que seguirá siendo quien es: "No voy a seguir modas ni a modificar mi sonido para llegar a los Grammy. Prefiero conseguir los Grammy haciendo el reggaeton que hace Jorge Drexler y haciendo los duetos que hace él en sus discos, y seguir ese tipo de caminos orgánicos y sinceros. Pienso seguir siendo quien soy, sólo voy a mejorar como persona".
"Nos vemos en unos años, sed felices", concluye el artista.