Para Diego Soliveres, Timpers es más que una oficina a la que ir todos los días. Hace más de 4 años que producir calzado, zapatillas para ser más específicos, se ha convertido en el proyecto central de Diego y sus dos amigos y socios, Aitor Carratalá y Roberto Mohedano con quienes ha formado más que una empresa, sino también una familia con un propósito claro: hacer las mejores zapatillas del mundo mientras "aportan su granito de arena" a través de la normalización de la discapacidad.
La empresa fundada en Valencia nació de una amistad y desembocó en una compañía que compite en el mercado de calzado por su diseño y calidad y que además está conformada por una plantilla de 7 personas, cada una con una discapacidad diferente, que luchan por combatir el tabú que existe en torno a ello en el sector laboral. Como predica su fundador, Timpers es una marca "especialmente bonita porque nace de su propio propósito", ya que cuando comenzaron a trabajar en conjunto, los tres amigos se percataron que se estaba formando una sociedad donde cada uno de sus miembros tenían una discapacidad: Aitor con fibrosis quística, Roberto trasplantado de riñón y Diego sin poder ver. Como una revelación divina decidieron que aquel mensaje debería ser la filosofía de una empresa en donde "las capacidades de cada uno son más importantes que las incapacidades" y así lo han mantenido.
Todo comenzó hace cuatro años cuando dos amigos alicantinos de toda la vida, Aitor Carratalá y Roberto Mohedano decidieron hacer unas zapatillas "normales" para vender con el nombre Timpers. En ese momento, la parejacompartía la afición de ayudar a entrenar en el equipo de ciegos de Alicante y no perdieron la oportunidad de llevar las zapatillas a uno de los entrenamientos para ver si podían vendérselas a los ciegos.
Para su sorpresa, al enseñarles las zapatillas a los no videntes, ellos las describieron mejor que una persona que puede ver, por ello se percataron que también podían diseñar unas zapatillas para ellos, con su ayuda. Aquella decisión fue los que los motivó a buscar colaboración en los vestuarios y la que los llevó a conocer a Diego, jugador y hoy miembro esencial de la firma de moda.
Ya con "el trío del poder" formado y con un producto consolidado, ganar el concurso de Emprendimiento Social de la Universidad de Alicante en donde se presentaron por primera vez como una marca de zapatillas con carácter social y con un logo en sistema Braille, fue el puntapié para que Juan Roig pusiera su atención en el proyecto y los invitara a Valencia a formar parte de Lanzadera y así apostar por su sueño. Lejos de sus familias en Alicante, el trio decidió fundar la marca en suelo valenciano, donde han crecido hasta el día de hoy.
Hoy sus zapatillas compiten en el mercado y se caracterizan no solo por sus detalles, flexibilidad y materiales sino que por su calidad y sus elementos diseñados casi a mano y con sumo cuidado y amor. Además, poseen un valor diferencial entre la competencia al visibilizar los tabúes que existen en el sector laboral en torno a la discapacidad.
Aquel valor y carácter social que adoptaron marca la diferencia de su empresa en el mercado ya que el 100% de su plantilla está compuesta por personas con una discapacidad para demostrar que con aquellas características se podría ser tan rentable y funcional como cualquier otra. Al poner el foco en lo que cada persona puede hacer en lugar de lo que no al servicio de la empresa y de otros, lo cierto es que, poco a poco aquella normalización fue impactando en la vida de los nuevos miembros de "la familia Timpers".
En España solamente 1 de cada 4 personas en edad laboral y con discapacidad trabaja y cada 100 emprendedores solamente 2 tienen discapacidad. Estos fueron los datos que la Fundación ONCE acercó al trío que sirvió como el disparador que motivó a los jóvenes a apostar por su proyecto. El resto fue un camino de esfuerzo que fue dando sus frutos a nivel personal y profesional.
"La primera vez que contratamos a alguien nos confesó que era la primera vez que le ofrecían un contrato de trabajo indefinido", cuentan sus fundadores a través de las redes. El proyecto no solo ha cambiado la vida de los creadores sino también en los empleados que encontraron un lugar en donde se centra en potenciar las capacidades en lugar de las incapacidades.
Hoy la empresa colecciona una serie de hitos en su historial que posiciona la marca como referentes de la discapacidad y de la sostenibilidad. Desde patrocinar la fundación de El Levante hasta haber sido convocados por el comité paralímpico para diseñar las zapatillas del desfile de los deportistas en Tokio fueron solamente algunos de los logros que los reconoce como compañía 100% reconocida en lo que se desempeñan.
Además, como plus, su humor, filosofía y "el reírse de ellos mismo"s en su comunicación y sus spots publicitarios, no solo es parte de la identidad de la empresa libre de tabúes sino también contribuye a llegar a aquella normalización y situación libre de tabúes faltante en el sector.
El pasado 3 de diciembre se celebró el Día Internacional de la Discapacidad, y por eso hemos hablado desde YASSS con Diego Soliveres, socio fundador de Timpers:
¿Cómo es Timpers ahora?
Nosotros seguimos creciendo. Actualmente somos 7 personas en el equipo, todos con discapacidad. Somos centro especial de empleo, que además acredita que mini el 70% de la empresa tiene una discapacidad, aunque nuestro caso es el 100%. Ahora lo que intentamos hacer es dar el salto a la marca de moda top que queremos ser y no que se nos reconozca tanto como “el proyecto social que hace zapatillas”, sino que necesitamos que se nos reconozca como una marca que hace zapatillas en la provincia de Alicante basadas en el diseño, en la comodidad, en la durabilidad y en la sostenibilidad y sobre todo que encima hacen eso, ponen su granito de arena, integrando a personas con discapacidad en el equipo.
Si la gente te ve como un proyecto social, la gente te compra una vez y hace el check como que “ya he colaborado con el proyecto social”. La gente lógicamente se siente bien, pero ni vuelven a colaborar ni a comprarte, entonces nosotros tenemos que tener claro que tenemos que vender por calidad y no por caridad. Tenemos que hacer la mejor zapatilla del mundo para que el carácter socia de la empresa, no pese en la decisión de la gente.
¿Qué obstáculos encontraron a la hora de crear Timpers como emprendedores y como personas con una discapacidad?
Hemos encontrado obstáculos como puede encontrar cualquier emprendedor. Al principio no tienes recursos, tienes que buscar subvenciones, concursos, premios y ayudas por todos lados. Aparte el sector del calzado es uno con muchos procesos, entonces nos tirábamos largas jornadas todo el día en coche de aquí para allá y esos obstáculos te puedo decir que son los de todo el mundo: falta de recursos, jornadas y palizas interminables. En nuestro caso, decidimos apostarlo todo por la empresa, y trasladarnos a Valencia para poder ser parte de 'Lanzadera' y de 'Marina de empresas' el tener que decidir el dejarlo todo en Alicante, familia, amigos, estudio, trabajos, para poder embarcarnos en nuestro proyecto.
Con lo de si nos ven diferentes, sí nos dimos cuenta que con el tiempo, nos estaba costando hacer clientes nuevos y por el tema de que, sí que es verdad que tenemos mucha recurrencia porque es un proyecto super bien visto y la comunidad que tenemos es brutal y fiel, pero cada vez que tu veías las noticias de Timpers en la prensa, es siempre “la marca de zapatillas diseñadas por ciegos”, “Timpers el proyecto formado por personas con discapacidad” entonces nosotros necesitamos, darle la vuelta y siempre me gusta decir que nosotros necesitamos que la discapacidad se vea como la anécdota y no como el titular como hasta ahora. Nos encantaría leer “Timpers la marca de moda que además apuesta por personas con discapacidad, entonces, no es una visión negativa aunque se nos viera diferente, pero es una visión que si se prolonga mucho en el tiempo no podríamos sostener la empresa, porque la gente colabora con el proyecto social una vez, y ya está. Necesitamos dar vuelta esa visión.
A nivel interno, distribuidores, competencia…
Yo creo que en el mercado no. Tampoco hemos sido reconocidos hasta ahora como la marca de moda porque aún somos una marca pequeña. Vamos creciendo poco a poco y vamos teniendo más opción de destinar más recursos a mejorar el producto. Hasta ahora, nosotros mismos, habíamos apostado siempre por el tema “discapacidad” ya que somos patrocinadores de la fundación del Levante, el año pasado fuimos la marca que hizo las zapatillas del desfile de la delegación paralímpica en Tokio, entonces creo que nosotros éramos los primeros que a lo mejor poníamos de manifiesto el carácter social y ahora hemos cambiado mucho de discurso.
Nosotros ante todo somos una empresa como otra cualquiera, con proveedores, sueldos y demás y nosotros somos los primeros que tenemos que vernos y apostar por ser una marca que haga un producto top, entonces cuando, no se nos ha visto como esa marca, probablemente porque no teníamos tan bien desarrollado el producto que para nosotros, hoy es lo primero. Hoy la zapatilla y el cliente es lo primero y gracias a eso vamos a poder seguir poniendo nuestro granito de arena en esta normalización de la que hablo, pero siempre a partir de la zapatilla y del cliente. Para que se nos vea de esa forma tenemos que proyectarnos de esa forma.
¿Veis mucho lavado de imagen con el tema de la inclusión de discapacidad en las empresas? ¿Es creación de imagen o realmente está habiendo un cambio por parte de los empresarios?
Mi opinión es que la gente se esta dando cuenta y no lo digo yo por tener discapacidad y tener Timpers, que la discapacidad en los equipos de trabajo enriquece. Primero porque a los trabajadores nos da siempre una visión diferente de saber qué necesidades puede tener el compañero, del trabajo en equipo, de si realmente yo soy ciego y no puedo estar en el almacén sacando las tallas, pero mi compañero Roberto al ser trasplantado de riñón no puede cargar peso, pues ahí estaré yo ayudando cuando haga falta a cargar peso y ahí estará el cuando haga falta ayudar a sacar pedidos. Entonces la discapacidad, tengo muy claro que enriquece los equipos de trabajo. Te da sentido del compañerismo viviendo en los tiempos de la prisa y del estrés en los que vivimos, que nunca nos ponemos “en los zapatos del otro” .
Creo que hay muchas empresas que están apostando por incluir a gente con discapacidad, pero por desgracia, todavía falta por el tema de las subvenciones o por este "tanto por ciento" de plazas destinadas a la discapacidad. Creo que el problema es que hay mucho desconocimiento. Todavía quedan brechas curriculares y salariales que esperamos que con nuestro trabajo que todas las empresas se sumen y que creemos sinergias entre todos. Hay que poner la capacidad de cada persona al servicio del equipo y del trabajo.
Cuando empezaron a contratar gente muchos se emocionaron porque era su primer contrato de trabajo... ¿Cómo crees que Timpers cambio la vida de las personas que están dentro?
Impactó primero muchísimo en nosotros cuando hicimos esos primeros contratos y veías a la gente contenta. La primera persona a la que contratamos era una persona, que ya no esta en la empresa, pero se encargaba de jefe de almacén. Hacía todos los pedidos y era una persona que estaba trabajando 10 horas semanales y con nosotros pasó a tener un contrato ya de 30 horas, y eso para nosotros te prometo que nos daba más satisfacción que vender un par de zapatillas.
Cuando damos trabajo a personas con discapacidad, además de estar contribuyendo a esta normalización, también estas ayudando a que estas personas recuperen la confianza y la autoestima que muchas veces pierden al no verse incluidas en este mercado laboral y por lo tanto han sido desplazadas en la sociedad. Para nosotros es algo muy grande y muy bonito, saber que estas ayudando a que esta gente pueda verse realmente incluida y estamos súper orgullosos.
Que mal tiene que estar el mercado para que algo tan normalizado como un contrato de trabajo cambie la vida de una persona 180 grados…
Es que es así porque creo que la gente todavía tiene ese prejuicio y ese tabú. Creo que cuando se hable de esto con total normalidad y se integre, se verá normal que cualquier persona con discapacidad trabaje y ya no se tendrá en cuenta lo de la discapacidad “oye esta persona es capaz de esto, o es buena en esto y por algo está aquí" y ya no se contrate a estas personas porque te dan una media pensión o porque te ahorras seguridad social.
¿Qué le dirías a alguien que tiene una empresa y se niega a contratar a alguien con una discapacidad?
Yo le diría a ese empresario o empresaria que valore a las personas por lo que son capaces. Por ejemplo, gente con discapacidad intelectual a lo mejor no tienen muchas habilidades sociales pero cuando le das un trabajo mecánico y ellos interiorizan el proceso lo hacen mejor que cualquiera. También le diría otra cosa. Le diría que hay unas discapacidades que no están a lo mejor en un carnet pero son mucho peores: yo creo que es peor ser mentiroso, ser impuntual, ser maleducado, que ser ciego. Eso se lo diría muy claro.
¿Cuándo ocurrió el momento en que dijeron "realmente estamos estamos aportando el granito de arena"?
Una fue cuando firmamos a nuestro primer trabajador porque ahí el propósito que teníamos tres amigos un año antes, se estaba convirtiendo en realidad. Para nosotros nuestro primer contrato de trabajo fue brutal de verdad. Luego hubo otro momento, cuando hicimos nuestra primera colaboración con El Levante (un club de fútbol de Valencia) que tiene una fundación que es la escuela de deporte adaptada para personas con discapacidad más grande de España y una de las más grandes de Europa y además fue el primer club en España que apostó por el futbol femenino. Entonces cuando nosotros nos convertimos en patrocinadores de El Levante e hicimos en su momento un modelo en el que el 100% de los beneficios iban para apoyar a todos los proyectos de deporte adaptado de la fundación vimos ahí que realmente estábamos siendo referentes en compromiso social.
También fue para nosotros un hito muy importante fue cuando contactó con nosotros el Comité Paralímpico y fuimos los que hicimos las zapatillas del desfile con la que los paralímpicas de Tokio, tanto en la ceremonia de inauguración como en la de clausura porque piensa que nosotros partimos del deporte y nuestro objetivo es ser referentes en discapacidad y no hay nada en el mundo más importante en el mundo de la discapacidad que una paraolimpiada. Han sido tres momentos que a nosotros nos han marcado incluso como personas.
¿Me puedes contar un poco de que se trata el proyecto "Tiempo de personas"?
Es una sección dentro de Timpers, en la que personas con discapacidad de todos los ámbitos de la sociedad cuentan sus historias y sus experiencias y se creo para que el resto del mundo se de cuenta de que hay otro modo de vivir, que la vida es cuestión de actitud y de seguridad y de esfuerzo y de no ponerse límites, porque hay muchas veces, somos nosotros los que hacemos más grande la pelota y nos ponemos limites.
Entonces en con "Tiempo de personas” queremos demostrar que la vida es una cuestión de actitud y que hay que poner todo el esfuerzo en esos límites con los que nos encontramos en superarlos y dejarlos a un lado con las experiencias de estas personas. Llevamos de todo tipo, desde el deportista paralímpico David Casinos o el cantante ciego, Zerafín Subiri que ha representado a España dos veces en Eurovisión, siempre son gente con experiencias y con historias enriquecedoras y brutales.
¿Qué visión tienes de Timpers en 5 años? ¿Qué te gustaría que Timpers cambie?
Me gustaría que dentro de unos años, nosotros seamos un equipo mucho mayor, subiendo y pudiendo seguir con nuestra filosofía, tanto a nivel discapacidad como a nivel sostenibilidad. A mi me encantaría que tanto se comenten cosas como esta normalización, éste apoyo a la economía local, ésta reducción de la huella de carbono gracias a la proximidad. Que todas estas cosas en las que estamos metidos y estamos poniendo tanto empeño y siempre pedimos que la gente se sume y pueda acabar siendo la tónica general.
Además, nosotros al ser la excepción de contratar gente con discapacidad, a mi lo que me gustaría cambiar es que las empresas se sumen a estas iniciativas y que todos nos sumemos a crear una sociedad sin barreras, de igualdad de plenos derechos. Creo que nosotros todavía estamos intentando ser el altavoz, todavía pequeñito, pero nos encantaría que al final todo el mundo se sume a estas buenas prácticas que tienen que ir ligadas al mundo de la empresa. Que no se vea siempre a la empresa y al empresario desde el punto de vista clásico e histórico y que podamos transmitir que hay empresas y empresarios en que las buenas practicas y el crear un futuro mejor son de verdad nuestro propósito cada día.
¿Ves que el contexto político-social ayuda a que las empresas se sumen? ¿O que la gente esta predispuesta sumarse a iniciativas de sostenibilidad?
Yo creo que sí. La gente esta cada vez comprometida con estas cosas y creo que ayuda mucho que lógicamente, ni nosotros ni nadie, puede estar aquí lanzando mensajes y volviéndote loco en temas de inclusión y de la discapacidad y luego no atender a la sostenibilidad. Yo creo que una vez que te metes en algo social hasta las rodillas, ya te tienes que meter en todo. Tú no puedes hacer caso a unas cosas sí y a unas cosas no, no es consecuente. Las nuevas generaciones esta cada vez más concientizadas y ahora cada persona joven, compañeros emprendedores, de aquí tanto del mundo, reciclan y es un ejemplo. La gente antes a estas cosas no hacia caso y creo que nace con un puntito de concientización que va a ir a más, porque por ejemplo, los hijos de mis compañeros y mis propios hijos eso ya lo van a tener arraigado. Es que no puede ser de otra manera.
¿Ustedes se consideran una empresa coherente con el "decir y el hacer"?
Yo creo que para que eso pase, es muy importante que nosotros llevamos esos valores como personas. Incluso antes de formar Timpers, seguro Roberto comulga con esos valores, Aitor comulga con esos valores y yo que hablo por mí, comulgo con esos valores de primera. También hace mucho al tener cada unos nuestra movida, quiero decir, yo por ejemplo que soy ciego de nacimiento, Aitor que tiene fibrosis quística, somos gente que sabe lo que es vivir este tipo de cosas a través de sus experiencias personales.
Por lo tanto, ya no es que hagas las cosas con un pensamiento o simplemente por una razón detrás, sino que tu experiencia y tu situación ya te va moldeando así y creo que lo más importante que tenemos es que, de verdad, nos creemos y comulgamos con todo lo que te he contado como personas y nuestro día a día, dentro y fuera del trabajo