Los gustos cambian y lo que en un momento nos pareció ideal y algo de lo que nunca podríamos cansarnos, el tiempo demuestra lo equivocados que estábamos y eso significa que ha llegado el momento de deshacernos de lo viejo y dejar paso a lo nuevo.
En ocasiones son cambios grandes, trascendentales, otras veces son detalles pequeños, que en realidad no suponen gran cosa, salvo el esfuerzo que tenemos que poner en eliminar esas pegatinas de los electrodomésticos y conseguir que de nuevo sean un lienzo en blanco.
Poco importa si se trata de esas pegatinas que ponen los niños pequeños para que el espacio resulte un poco menos aburrido o si son pegatinas profesionales que venían con el aparato y queremos quitar sin que quede la tan antiestética marca que señala dónde estaba el final de la misma. Lo importante es retirarlas sin dejar huella y eso no es tan sencillo como parece.
Con el paso del tiempo, el pegamento se va modificando, haciendo no solo que resulte más complicado retirarlas de una sola pieza, sino también dejando marcas que no siempre se van de la manera más sencilla. Conocer los mejores trucos para realizar esta tarea puede ser nuestra tabla de salvación.
Cada superficie es diferente y se limpia de manera distinta, los materiales no funcionan igual y por eso no es lo mismo limpiar una pared que una encimera o un electrodoméstico. Sin embargo, hay algunos trucos que funcionan con varias superficies y que pueden dar resultados estupendos en los electrodomésticos de donde queremos eliminar pegatinas y restos de pegamento.
Un buen truco es emplear el uso del calor y en estos casos lo más sencillo es emplear un secador de pelo. Lo mejor es empezar por una de las esquinas y una vez que consigamos despegarla, levantarla un poco e ir aplicando el calor desde esa esquina y tirando de ella con cuidado para que no se rompa y también para no quemarnos con el calor del aparato.
En algunas superficies es suficiente con ablandar la pegatina con aga tibia con un poco de jabón, pero este truco no siempre es efectivo en los electrodomésticos, si estos son de acero inoxidable, aplicar aceite en un paño de microfibra y frotar es la mejor solución para eliminar los restos de pegamento, aunque antes es recomendable quitar la mayor cantidad de pegatina que podamos con las manos.
Si la superficie que queremos tratar es de plástico, el vinagre blanco puede ser nuestro mejor aliado, mezclando dos partes de agua caliente, una de vinagre y un chorrito de jabón líquido. Humedecemos la superficie con esta mezcla ayudándonos de una esponja y frotamos delicadamente la zona con una rasqueta para eliminar todos los restos.
Lo más importante es que no perdamos la paciencia y evitemos emplear herramientas o materiales que puedan dañar o rayar la superficie. Después solo tendremos que limpiar bien con un trapo y, si queremos, con una mezcla de agua y bicarbonato.