En verano, para combatir las altas temperaturas y las olas de calor tan habituales en esta época, solo apetece estar en casa con el ventilador o el aire acondicionado encendido o, por otro lado, hacer planes refrescantes. Entre ellos, darse un chapuzón en la piscina.
No obstante, hay quienes no cuentan con una propia, ya sea de construcción o de las hinchables o desmontables, así como tampoco tienen la suerte de tener amigos que dispongan de una. Tener piscina es un lujo o mejor dicho una suerte, sobre todo en aquellas poblaciones alejadas de la playa. Una ventaja de la que también se puede sacar beneficio económico.
Actualmente, existe la opción de alquilar por horas tu piscina particular. Un negocio que se puede hacer a través de diferentes portales webs, los cuales tienen un funcionamiento similar al conocido y popular ‘Airbnb’, una plataforma digital dedicada a la oferta de alojamientos a particulares y turísticos.
En el caso de tener una piscina privada y querer sacar un rendimiento económico de ella, además de disfrutarla, puedes optar por alquilarla a particulares a cambio de una tarifa acordada por un periodo de tiempo determinado. En este caso, también se pueden incluir otras instalaciones anexas como puede ser una barbacoa, tumbonas, pistas de tenis o de pádel, entre otros.
Lo primero que se debe hacer es entrar en la plataforma y fijar el precio que se considera oportuno y el número de usuarios a los que se les permite el acceso o la entrada, lo que va a variar también en función del espacio y las dimensiones del lugar. Asimismo, se deben precisar las reglas a respetar.
Desde Swimmy, una de las pioneras y a su vez más populares en España, país en el que hay un gran número de piscinas de uso privado, animan a los propietarios a unirse a su 'comunidad’ y a utilizar sus servicios bajo el eslogan de “La felicidad se comparte”. “Rentabiliza los gastos de tu piscina desde el primer chapuzón. O dicho de otra forma: haz feliz a la gente y a tu cartera al mismo tiempo”, anuncian en su página web.
Un negocio que puede llegar a embolsar cantidades de más de seis cifras en una sola temporada. Eso sí, las ganancias dependen de la disponibilidad que tengas y ofrezcas las instalaciones, entre otros aspectos. Es decir, a la hora de anunciar la piscina en el portal web, acompañada de todas las condiciones, debes añadir la frecuencia con la que quieres alquilarla. En dicho apartado vas a poder elegir entre: de vez en cuando, toda la semana incluido fines de semana o únicamente estos últimos.