Comey frente a Trump
A nadie se le escapa que si el ex-director dice que Donald Trump intentó obstruir las investigaciones del FBI sobre la posible interferencia de Rusia en las elecciones de Estados Unidos y la colusión de intereses entre personas de la campaña de Donald Trump y Rusia, tendremos impeachment a la vista.
El Impeachment es un “juicio político”. El único presidente de Estados Unidos que sufrió un impeachment fue Bill Clinton por el caso Lewinsky. Por un voto en el senado fue declarado absuelto. Nixon, cuando supo que se anunciaba el impeachment contra él dimitió.
El "juicio politico” lo aprueba el congreso y lo “juzga” el senado. En ambas cámaras los republicanos - el partido por el que Donald Trump se presentó a las elecciones- tiene mayoría absoluta. Esto debiera ser garantía de que no se produjese. A ello hay que añadir que el año que viene hay elecciones de “medio-término” es decir que se renuevan el congreso completamente y un tercio del senado de Estados Unidos.
Y esta es la gran batalla político-ideológica. la mitad de los republicanos electos creen que Trump es un desastre y estarían encantados de echarle de la Casa Blanca. Consideran que Trump ni representa sus valores, ni es republicano.
Este grupo está liderado por influyentes senadores como MacCain. Por otro lado, la cercanía de las elecciones y el posible enfado de los votantes republicanos, hace que los congresistas más críticos se lo piensen dos veces antes de presentar el impeachmet ( no vaya a ser que pierdan la mayoría en ambas cámaras).
A todo ello hay que sumar las no-pruebas hasta el momento en contra de Donald Trump. En la intervención de los cuatro máximos responsables de las agencias de inteligencia de Estados Unidos este miércoles en el Congreso, los cuatro aseguraron no sentirse presionados por Donald Trump para dejar de investigar u obstaculizar sus investigaciones respecto del #RusiaAffaire que es como lo denominan los medios estadounidenses.
En el escrito previo a la declaración, Comey asegura que Trump le pidió que “ se portara bien con Flynn porque era un buen chico”. Flynn, ex asesor en materia de Seguridad Nacional y General estadounidense dimitió de su cargo al conocerse que tenía relación con diplomáticos rusos.
Está siendo investigado como “persona de interés”, por el FBI. Según el escrito de Comey, comenzó el 6 de enero a tomar notas de sus conversaciones con el “Presidente, algo que no había hecho antes”. Y este detalle puede terminar en su contra.
El hecho de que transcribiera conversaciones que él como director del FBI creyese que pudieran ser objeto de “investigación o polémica” y que no se lo dijera a nadie, ni comentase con el Secretario de Estado de Justicia, o su superior en la NSA sus preocupaciones, pueden derivar en una investigación contra el propio Comey.