El combate contra las descargas ilegales, según la Comisión, "se centrará en los proveedores de servicios que, o infringen los derechos de autor ellos mismos, o que sistemática y conscientemente facilitan o sostienen las actividades de piratería de otros y se aprovechan de ellas".
"Todos los proveedores de servicios afectados deberán respetar un nivel adecuado de atención en sus operaciones comerciales", ha señalado el comisario de Mercado Interior, Michel Barnier, sin precisar qué deberán hacer en concreto los operadores para vigilar a sus clientes.
Se ha limitado a destacar que cualquier reforma legal respetará todos los derechos fundamentales, y en particular el derecho a la propiedad privada, a la protección de datos personales y libertad de expresión e información.
El ejecutivo comunitario prometió además inspirarse en "en todo lo que se hace de forma eficaz y pragmática" en los Estados miembros para combatir las descargas ilegales, y ha citado en concreto los modelos de Países Bajos y España.
Bruselas propondrá reforzar la legislación de la UE para combatir de forma más eficaz las infracciones de los derechos de autor en Internet.
"Cualquier modificación debe tener como objetivo afrontar las infracciones en su origen y, para lograrlo, impulsar la cooperación con los intermediarios, como los proveedores de servicios de Internet", ha subrayado Barnier.
El canon
El Ejecutivo comunitario ha anunciado además que va a nombrar este año a un mediador de alto nivel para tratar de armonizar el canon digital en la UE, consultando con todas las partes implicadas.
El mediador recibirá concretamente el encargo de examinar la metodología para calcular el canon, qué aparatos deben estar sujetos a él, si sólo los destinados a uso privado o también los que se utilizan a nivel profesional, y cómo reducir las diferencias entre los sistemas nacionales.